Las malas costumbres… crecen
No estamos preparados para tanto.
No estamos preparados para tanto.
Restaurando nuestra vida.
El amor de un abuelo como yo, no tiene fecha de expiración.
“Yo veo un México con hambre y con sed de justicia, de gente agraviada”.
Con eso basta, no hay más.
Resultado de nuevos caminos de incertidumbre.
Sufrir momentos desagradables, algunos por consecuencia de nuestra imprudencia o inmadurez.
40 años no es nada.
Son lecciones de vida y tanta sabiduría a través de los años.
Un estudio de las oficinas centrales de la PROFECO revelan que 8 de cada 10 familias adquirieron previamente los regalos.