Ya estamos de regreso en este espacio de opinión después de unas semanitas de descanso. Este lunes se reactivó la mayoría de los burócratas a sus actividades diarias y se les vió muy activos durante la ceremonia de honores a la bandera de todos los lunes, incluidos algunos diputados, aunque ellos siguen de receso.

El que sí no descansó durante el periodo vacacional fue el gobernador, ejemplo que deberían de imitar sus subordinados a quienes se les vió disfrutando de las Europas en lugar de seguirle el paso.

Este fin de semana marcó de hecho un momento histórico para Tamaulipas, el arranque formal del Puerto del Norte, ubicado en la región de El Mezquital, municipio de Matamoros, en pleno periodo vacacional. Se trata de la tercera terminal marítima de altura del estado después de Tampico y Altamira y representa una apuesta por la reconfiguración logística del noreste de México.

La ceremonia de arranque fue encabezada por el gobernador Américo Villarreal, acompañado de autoridades federales y representantes del sector privado. El evento incluyó el arribo simbólico del buque “Integrador”, como parte del inicio oficial de operaciones.

El proyecto, que había estado en pausa durante varios sexenios, cobró nuevo impulso en los últimos meses tras la obtención de permisos federales gestionados por el Gobierno estatal, fruto de las múltiples giras de trabajo del gobernador por la CdMx. La presidenta Claudia Sheinbaum reconoció este lunes la importancia estratégica del puerto y destacó el esfuerzo del estado para ponerlo en marcha.

Para que nos demos una idea de la magnitud del proyecto, este nuevo puerto acerca al Golfo de México con los polos manufactureros del norte y noreste del país. Reduce tiempos de tránsito, costos de transporte y ofrece una alternativa para las industrias de Nuevo León, Coahuila, San Luis Potosí, Durango y Texas. Según estimaciones oficiales, el traslado de vehículos desde Monterrey, por ejemplo, pasará de 9 a menos de 5 horas.

Además de su potencial comercial, el proyecto busca detonar un clúster logístico industrial que genere empleos, fortalezca a las pequeñas y medianas empresas, y brinde servicios marítimos de cabotaje.

La inversión estimada, en distintas etapas, supera los 12 mil millones de pesos. Las autoridades estatales aseguran que el puerto está llamado a convertirse en una palanca de desarrollo económico para Tamaulipas y la región noreste del país.

Con el Puerto del Norte, Matamoros se suma a la red de infraestructura estratégica del país. El reto ahora será mantener su operación, atraer inversión privada y conectar de manera efectiva con los corredores industriales, es decir, consolidar este proyecto que llevaba años esperando su momento.

¡En hora buena!