En Victoria se acabó la tolerancia para los llamados “Ecolocos”, esos ciudadanos irresponsables que convierten plazas, jardines y áreas verdes en auténticos basureros clandestinos
La medida surge luego de crecientes quejas de vecinos, cansados de que frente a sus casas se acumulen montañas de bolsas negras, olores nauseabundos y enjambres de insectos