Según un estudio realizado por Oxford academics basado endatos hasta el tercer trimestre de 2022, el déficit comercial se amplió a un récord de 47 000 millones de dólares (3,3 % del PIB), lo que refleja el aumento de los precios de los productos básicos importados y la recuperación de la demanda interna. Sin embargo, el déficit de bienes y servicios sigue estando totalmente financiado por casi 40 000 millones de dólares (2,9 % del PIB) en entradas de IED y remesas récord de 58 000 millones de dólares.
Además, la prudente política monetaria de Banxico condujo a atractivos diferenciales de tasas de interés reales con los Estados Unidos, lo que hizo costoso para los especuladores acortar el peso. Por último, la obsesión de AMLO con los presupuestos equilibrados y la reducción de la deuda proporcionó una fuerza comparativa única en comparación con otros EM. Esta combinación ayudó al peso a superar a otras monedas emergentes a pesar de la volatilidad provocada por la remodelación de las carteras de inversión para excluir a Rusia de la mayoría de las finanzas Mercados e índices. Los operadores especulativos en los mercados de futuros han aumentado sus posiciones netas a favor del peso a los niveles más altos desde la pandemia.
Sin embargo, no esperamos que este estado de cosas dorado y la complacencia del mercado con respecto a los riesgos internos idiosincrásicos de México dure para siempre. De hecho, creo que el peso estaba en su punto máximo hacia 2023 y espero que se debilite gradualmente a partir de entonces.
El creciente riesgo de recesión en los EE. UU. probablemente tendrá un efecto similar en México. Los miembros del banco central de México ya están mostrando los primeros signos de división con respecto a la necesidad de seguir a la Reserva Federal de los Estados Unidos en un territorio más restrictivo el próximo año, lo que podría dar paso a un llamamiento de comercio algo más pequeño dados los diferenciales de tasas más estrechos.
Además, los esfuerzos de AMLO para recuperar el control estatal de la economía han aumentado la incertidumbre política, y su desprecio por las instituciones autónomas del país erosiona los controles y equilibrios de su caprichosa regla. Las grandes calificadoras pronostican que el peso se depreciará gradualmente hacia MXN 20.8/USD durante los próximos 12 meses, desde MXN19.5/USD a finales de 2022.