“Otra parte cayó entre espinas, y las espinas crecieron y lo ahogaron, y así no dio fruto” (Mc 4:7).
Si has de buscar hacer el bien, olvídate de la venganza, olvida también el odio y el resentimiento, de otra manera, en tu nueva oportunidad para hacer las cosas mejor, encontrarás que aquello que más detestabas en otras personas, forma parte de tu personalidad.
Si has de buscar el bien, no pienses primero en lo que tú necesitas para sentirte realizado, piensa mejor, en todos aquellos que no tuvieron tus privilegios y fortuna, porque ellos quedaron estancados en la medianidad de la nada, esperando justicia.
Aléjate de la soberbia cuando estés encumbrado, es fácil olvidar, cuando se ha logrado tener poder, olvidando también el cómo llegaste a ese pedestal, por tantas personas que sólo ambicionan el estar por encima de su prójimo y que aseguran ver como hermanos.
“En fin, el mayor de vosotros ha de ser ministro o criado vuestro. Que quien se ensalzare será humillado, y quien se humillare será ensalzado” (Mt 23:11-12).
Envía Señor a tu Espíritu Santo para que nos ayude a tomar las mejores decisiones, nos aleje de las malas intenciones y nos proteja de los que sólo buscan lucrar con las necesidades de los más necesitados.
Bendícenos Padre celestial y bendice a nuestra familia, así como a todos nuestros Domingos Familiares.
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