No es casualidad que sea una de las bebidas de mayor consumo en todo el mundo. Podemos conseguirlo en cualquier supermercado, aunque su costo suele ser algo elevado. ¿Has pensado en cultivar café en casa?
Quizás crees que esto no es posible, pero por supuesto que sí lo es. De esta forma, ya no tendrás que ir a ninguna parte a comprarlo. Además, su exquisito aroma destacará en tu jardín, huerto, terraza o dondequiera que crezca.
Se trata de una planta que tiende a medir desde 3 hasta 10 metros de alto, pero también es posible tenerla en interiores, dentro de macetas. Si quieres una propia, ¡lee este artículo!
Características de la planta de café
10 variedades de café son cultivadas para deleitar nuestro paladar. La más conocida y antigua es Coffea arabica, proveniente de Etiopía y zonas tropicales de África. En la actualidad, representa el 60 % de la producción a escala mundial y su cultivo está muy propagado en América del Sur y América Central.
Este arbusto es llamado cafeto. Tiene flores blancas que se amontonan alrededor de los tallos. Por su parte, el fruto (drupa o cereza), en su primera etapa es verde, pero se torna rojizo o violáceo a medida que madura. Dentro guarda la semilla que llega a cada hogar.
El café es sensible a los factores atmosféricos, en especial al viento. En este orden de ideas, las altiplanicies tropicales (con una altitud máxima de 2000 metros) son los ambientes idóneos para cultivar el café, pues su clima húmedo y fresco es el escenario perfecto para lograr un crecimiento sin estrés.
¿Se puede sembrar café en casa?
Si bien la plantación de café es más común en el campo o en zonas rurales, ¡claro que es posible sembrarlo en casa! Eso sí, por tratarse de un hábitat fuera de su espacio natural, asegúrate de que las atenciones sean suficientes: enfócate en mantenerlo libre de plagas, hidratado y nutrido con fertilizantes foliares o líquidos.
Si prefieres cultivar café dentro de la casa, no lo coloques en un puesto que reciba la luz del sol directamente. Mientras que, si eliges el exterior, dispón de un área amplia para que nada interfiera en su desarrollo.
Eso sí, debes ser muy paciente. La planta demora varios años en alcanzar su madurez. Después, los granos se recogen y pasan a la fermentación, el lavado, el secado y el tostado.
¿Cómo es el proceso para sembrar café en casa?
No importa si no eres un experto o no sabes nada sobre jardinería. Atiende muy bien estas instrucciones, cúmplelas al pie de la letra y tu cultivo de café no fallará.
Hazlo en primavera
La temporada es decisiva y a comienzos de primavera es la época más apropiada. La razón es que las temperaturas son buenas para que ocurra la germinación. Recuerda que el café se desarrolla bien en climas tropicales.
Consigue las semillas o la planta
Visita tu tienda jardinera favorita para comprar las semillas correctas. Es indispensable que sean de una cosecha cercana, para que el germinado se dé sin inconvenientes. De lo contrario, la planta podría no crecer o hacerlo mal.
Otro camino a seguir es adquirir un ejemplar de café que ya haya germinado. Si te inclinas por esta opción, la ventaja es que ganarás tiempo, dado que no tendrás que esperar a que germine. ¡Tú decides!
Empieza a cultivar café
Utiliza una tierra nueva rica en humus o combina 70 % de turba y 30 % de perlita. Asegúrate de que no tenga residuos de abono o cualquier elemento que pueda dañar el trabajo. Lo más adecuado es que el sustrato sea poroso.
El paso siguiente es depositar las semillas en la tierra, a unos 4 centímetros de profundidad, y cubrirlas. Ten presente que para un crecimiento óptimo, la temperatura debe ser de 25 grados centígrados.
Cabe destacar que algunas personas optan por plantar primero en un semillero relleno de compost, para luego trasplantar hasta el lugar definitivo. Este proceso requiere abrir pequeños huecos de 1 centímetro para introducir las semillas y tapar.
Riega con la cantidad de agua acertada
Como sucede con todas las plantas, el riego es determinante. Los caficultores sugieren regar con abundante agua la primera vez. Luego, hay que hacerlo en cantidades moderadas, dos veces a la semana.
Espera que la planta crezca
Al cabo de un mes o hasta dos, tu planta habrá germinado. Entonces, en caso de que hayas escogido un semillero, podrás trasplantarla a una maceta para llevarla adentro o bien dejarla en el jardín. Seguirá creciendo poco a poco. Después del primer semestre medirá entre 15 y 20 centímetros de alto.
Más tarde aparecerán sus flores y quedarás encantado con su belleza y aroma. Para que la etapa de floración sea saludable hace falta una temperatura de entre 28 y 33 grados centígrados. Esto se extenderá por un mes, hasta que las flores se tornen marrones y caigan.
Poda
Las podas no son obligatorias, pero son útiles si tienes la planta dentro de casa. Sirven para controlar su tamaño.
¡Cosecha!
En los 6 a 8 meses posteriores a la floración se dará la etapa de fructificación. La tan esperada hora de cosechar habrá llegado cuando los frutos muestren un color rojo muy intenso.
Sin embargo, si las cerezas se caen antes de lograr esta tonalidad, será una señal de inmadurez. En general, el cafeto amerita unos 9 años para dar frutos utilizables. ¡Te parecerá eterno, pero valdrá la pena!
Seca y tuesta las cerezas
Si quieres el café para tu consumo, sigue estos pasos:
Abre los frutos y retira las semillas.
Sumerge los granos en agua por varios días para que fermenten. Cuando los sientas arenosos y veas burbujas, sácalos y enjuágalos usando agua dulce.
Espárcelos al sol por una semana. Estarán listos cuando los presiones con los dientes y se agrieten.
Quita la piel externa y las capas de color plateado. Deja únicamente las judías verdes.
Ásalas en un horno calentado previamente a 200 grados centígrados durante 10 minutos.
Disfruta al máximo tu café
Cultivar café no solo te servirá para tener tu bebida favorita de todos los días a mano. Además, este grano se puede utilizar para muchas rutinas de belleza y para cuidar tu piel. No hay excusas. Tienes poderosos motivos para hacer tu siembra.