No comer o no dormir, ¿Cuál será más letal? Por supuesto, la pregunta no supone un reto, sino dar una explicación. La ciencia ya puso a prueba este cuestionamiento y te mostramos si no agarrar la cuchara o no poner la oreja en la almohada te puede matar, sobre todo en estos días en que las temperaturas no ayudan a irse a la cama.

¿La falta de sueño es letal?

Es bien sabido que dormir es necesario no solo para reponer energía, sino también para ayudar al cuerpo a restaurar funciones básicas, así como la de órganos, tejidos y por su puesto, de los sistemas, ya que te vuelves menos propenso a las enfermedades si concilias bien el sueño.

Si te preguntas cuánto es lo máximo que una persona ha durado sin dormir, el récord pertenece a un chico de 17 años, Randy Gardner, que estuvo 264 horas, que se traducen en 11 días, sin cerrar los ojos. A este joven lo vigilaron y estudiaron un grupo de neurocientíficos junto con el doctor William Dement.

Conforme pasaron los días, los efectos que comenzó a mostrar eran cada vez peores: para las 72 horas ya tenía fallas de memoria, dolor de cabeza, náuseas, además de un terrible humor.

Para los cinco días sin dormir oía sonidos y veía gente que no existían. En el noveno día, ya le costaba trabajo completar oraciones y su visión era borrosa. En las últimas 24 horas, sus funciones cognitivas ya estaban muy deterioradas y quienes lo vigilaban pudieron rescatarlo.

Aunque pasó un día en el hospital, se demostró que el chico a corto plazo no tuvo efectos secundarios, pero años después comenzó a padecer de insomnio y no se descarta que haya sido por el experimento que realizó.

El no dormir se vuelve letal a partir de una enfermedad que se llama insomnio familiar fatal en la que el paciente no puede conciliar el sueño por más que quiera y entonces aparecen una serie de afecciones que terminan en la coma y luego en la muerte.

¿No comer me puede matar?

Aunque esta pregunta tiene muchas aristas por el tipo de persona que se somete a la falta de comida o si realiza o no esfuerzo físico, el promedio de días está en 40 si es que se toma agua en el proceso, aunque hay quienes han alcanzado los dos meses; la cifra se reduce solo a 3 o 5 días si no se toma agua.

Con estos datos podemos inferir que no dormir es una tarea casi imposible, pues nadie lo ha hecho más de 11 días mientras que hay gente que ha estado 60 días sin probar alimento, y sólo bebiendo un poco de líquido, así que no comer parece ser menos letal que no conciliar el sueño. Aún así, algo importante a recordar es que no es recomendable realizar ninguna de estas dos situaciones presentadas.