Ciudad de México.- Un enfrentamiento físico entre el dirigente nacional del PRI, Alejandro “Alito” Moreno, y el senador petista Gerardo Fernández Noroña durante la sesión de la Comisión Permanente en el Senado encendió la tensión política y abrió un nuevo capítulo en torno al futuro legislativo del priista.
De acuerdo con videos difundidos en redes sociales, el altercado ocurrió el miércoles 27 de agosto, cuando Moreno y legisladores del PRI encararon a Noroña en medio de la discusión parlamentaria. El intercambio subió de tono hasta derivar en empujones y manotazos, lo que obligó a detener momentáneamente la sesión.
Tras el incidente, Fernández Noroña anunció que presentará una denuncia penal por lesiones contra Moreno y adelantó que solicitará también su desafuero, así como el de otros diputados priistas que participaron en la trifulca.
“No voy a permitir que se normalice la violencia en el Congreso. Presentaré una denuncia penal contra Alejandro Moreno y solicitaré su desafuero”, advirtió el legislador.
El episodio ocurre en paralelo al proceso que ya enfrenta “Alito” en la Sección Instructora de la Cámara de Diputados, donde se analiza una solicitud de desafuero presentada por la Fiscalía Anticorrupción de Campeche, que lo acusa del desvío de 83.5 millones de pesos durante su gestión como gobernador.
La Mesa Directiva convocó a una sesión especial para el viernes 29 de agosto, en la que se prevé abordar tanto el altercado como las demandas de desafuero.
El dirigente priista no se ha pronunciado de manera directa sobre el pleito, pero ha calificado los procesos legales en su contra como una “persecución política” impulsada desde el gobierno de Campeche.