A menos de dos semanas de la toma de protesta del nuevo Poder Judicial, siete jueces electos renunciaron a sus cargos, obligando al Congreso del Estado a llamar no sólo a los segundos, sino hasta a terceros lugares para cubrir las vacantes.
Francisco Adrián Cruz Martínez, presidente de la Diputación Permanente, confirmó que la notificación a los suplentes se realizó la semana pasada, en estricto apego a la legalidad y los principios de paridad de género.
“Para ocupar las vacantes primero consideramos a los segundos lugares, pero por el principio de paridad y los requisitos legales, tuvimos que recurrir incluso a terceros lugares”, explicó Cruz Martínez.
El legislador detalló que los motivos de estas renuncias están ligados a razones personales, laborales y económicas: traslados, carga laboral, compromisos familiares y el alto costo de vida.
Entre los casos destacados, Ivonne González Salinas, originalmente designada como jueza civil en Nuevo Laredo, fue reemplazada tras la negativa de la segunda y tercera opción, quedando finalmente Óscar Manuel López Esperanza.
De manera similar, Anabel Almazán Botello de Altamira fue sustituida por Silvia Guadalupe Treviño Enríquez; Yaritza Atziri Bonilla Molina de El Mante dejó su cargo a Cristian Reyes García; y en Matamoros, Claudia Edith Villasana asumirá tras declinar Ángel Valencia Martínez.
Con estas dimisiones consecutivas, el Poder Judicial enfrenta un inicio con incertidumbre y cuestionamientos sobre la estabilidad institucional y la seriedad del proceso de asignación de jueces en Tamaulipas.