El riesgo de un incremento en los casos de dengue en el sur de Tamaulipas es inminente tras las lluvias e inundaciones recientes, reconoció la Secretaría de Salud del estado. Aunque la proliferación del mosquito transmisor será difícil de contener por completo, ya se están desplegando brigadas y recursos para evitar que la situación se convierta en una crisis sanitaria.

“Es inevitable que el mosquito comience a proliferar y que aumenten los casos, pero estamos trabajando para que no se salga de control”, aseguró Martín Arturo Rodríguez Alcocer, subsecretario de Atención Médica.

Aunque las acciones de prevención, indicó que se realizan en todo el estado, añadió que particularmente en Tampico, Madero y Altamira se están efectuando operativos permantes en conjunto con personal del IMSS Bienestar y autoridades municipales.

De enero a la fecha se han confirmado 300 casos de dengue en la entidad, de los cuales más del 80% corresponden a los municipios ya señalados. en el mismo período, también se ha registrado una defunción relacionada con esta enfermedad.

Rodríguez Alcocer explicó que, además de las labores de fumigación y control larvario, se ha garantizado el abasto de insumos como insecticidas y abate. Las brigadas sanitarias también recorren colonias para identificar posibles criaderos del mosquito.

“Fue muchísima lluvia y nunca hay trabajo suficiente cuando hay tanta acumulación de agua; por eso se están reforzando las acciones”, dijo el funcionario.

En cuanto a la red hospitalaria, aseguró que no hubo daños graves. Aunque algunas unidades reportaron filtraciones menores, los hospitales siguen funcionando con normalidad y sin afectaciones en su capacidad operativa.