Las dirigencias estatales de los partidos políticos se alistan para el relevo. Algunos partidos lo harán de manera formal con la votación de un Consejo y otros con cambios de facto, sin asamblea ni entrega de membretes.
En Movimiento Ciudadano el relevo está marcado para finales de 2024, en donde el resultado positivo en la votación del 2 de junio, establece condiciones para que Juan Carlos Zertuche pueda reelegirse, aunque en su carácter de diputado el nombre de Gustavo Cárdenas vuelve a resonar.
En un escenario similar, está en juego la dirigencia del Partido Verde, a cargo de Manuel Muñoz Cano, quien también busca repetir gracias a los resultados que les otorgó su alianza con Morena. La posibilidad de que Eugenio Hernández Flores podría asumir la dirigencia quedó descartada tras su nombramiento como Secretario de Operación Política del CEN en esa parcela.
En Morena, los estatutos obligan la salida de Yuriria Iturbe de la dirigencia, pero los mismos reglamentos señalan que no es compatible con su nuevo encargo como diputada local. En este escenario, Marcos Zuviri Rivera, Secretario General del partido se encamina a asumir en agosto la Presidencia para en 2025 convocar a Asamblea para renovar la dirigencia y el Consejo Político.
El PRI está a la espera de la reelección de Alejandro “Alito” Moreno, para iniciar con la renovación de la dirigencia estatal y para sustituir a “Paloma” Guillén hay por lo menos “tres tiradores” que ya alzaron la mano, Luis Enrique Arreola, Arturo Núñez y Ramiro Ramos Salinas.
Para el PAN el relevo sería de facto, pues si bien, la Presidencia de Luis René Cantú termina hasta el 2025, es una versión a voces que a partir de octubre César Verástegui Ostos será quien en los hechos, tome las decisiones de ese partido.