La provincia de Pinar del Río, en el extremo occidental de Cuba, enfrenta una grave crisis por incendios forestales que han consumido cerca de 7,100 hectáreas en lo que va de 2025, cifra que supera lo afectado en los últimos cuatro años combinados, informó la prensa oficial.

Entre 2021 y 2024, el promedio anual de áreas quemadas en la región fue de aproximadamente 1,512 hectáreas, según datos del Cuerpo de Guardabosques de Cuba (CGB). El jefe de esta entidad en Pinar del Río, Alexander Pereda, atribuye la magnitud del problema a una prolongada sequía, junto con conductas irresponsables de cazadores y pescadores furtivos que contribuyen al inicio de los siniestros.

Pereda también señaló que las limitaciones en maquinaria y disponibilidad de combustible han dificultado la creación de trochas y líneas cortafuegos, elementos esenciales para el control y combate de los incendios en zonas forestales.

El más reciente incendio, registrado hace poco más de una semana, afectó alrededor de 200 hectáreas de bosque. De acuerdo con el CGB, este año se esperan entre 88 y 105 incendios en toda la provincia, de los cuales casi 70 ya se han reportado.

Pinar del Río cuenta con más de 411,000 hectáreas de bosques y representa casi la mitad de la superficie reforestada de Cuba, siendo la segunda provincia con mayor cobertura arbórea del país. El período más crítico para los incendios coincide con la temporada seca, que va de enero a mayo.

En 2024, durante la campaña anual contra incendios forestales que se lleva a cabo en esos meses, se registraron 326 conflagraciones que afectaron cerca de 3,000 hectáreas de bosque, evidenciando la creciente vulnerabilidad de esta región ante el fuego.