El Gobernador de Texas, Greg Abbott, anunció que el estado tomará medidas sin precedentes para combatir la inmigración ilegal, incluidos planes para alquilar autobuses que llevarían a los migrantes liberados desde la frontera hasta el Capitolio, en Washington, D.C.
El estado también intensificará las inspecciones de seguridad de los vehículos provenientes de México, una medida que Abbott reconoció podría retrasar severamente los cruces y ampliar la aplicación en varios puntos a lo largo del Río Bravo (Grande en EU).
Abbott no llegó a declarar el reciente aumento de la migración como una “invasión”, lo que le permitiría usar más recursos estatales para hacer cumplir las leyes federales de inmigración.
El republicano dijo que las medidas mejoradas eran necesarias para combatir el aumento en la migración que se espera aumente aún más el próximo mes cuando la Administración Biden ponga fin a la autoridad del Título 42 que le permite a EU rechazar a los inmigrantes sin escuchar las solicitudes de asilo.
“Texas tomará sus propias medidas sin precedentes este mes para hacer lo que ningún estado de Estados Unidos ha hecho jamás, para asegurar nuestro estado y nuestra nación”, dijo Abbott durante una rueda de prensa en Weslaco.
Abbott señaló que la próxima semana se anunciarán medidas adicionales. El Gobernador ya amplió el cerco fronterizo y desplegó policías estatales y tropas de la Guardia Nacional en la región para una misión de seguridad que él llama Operación Estrella Solitaria y que comenzó el año pasado.
Los autobuses rentados transportarían a los inmigrantes de las comunidades fronterizas y los llevarían a los “escalones del Capitolio de EU”, dijo Abbott. El Gobernador enmarcó el plan como un esfuerzo para aliviar la carga de las ciudades de Texas que han absorbido un gran número de personas que cruzan la frontera.
Abbott se postulará para un tercer mandato en noviembre y ha hecho de la seguridad fronteriza un principio clave en su campaña. Ha dicho que las políticas de “frontera abierta” de Biden han resultado en un número récord de inmigrantes indocumentados que intentan ingresar a Texas. El Gobierno federal prevé 18 mil cruces ilegales por día tras la eliminación del Título 42, según Abbott.