En estos momentos, a mi lado se encuentra Rita, como suelo llamarla, ella es una de mis pacientes, tiene la edad de la esperanza, que suele llegarnos a todos, cuando aún tenemos fe en las personas y en su capacidad de comprensión y de misericordia; pero ella se ha vuelto desconfiada, porque siente que la vida no ha sido justa. Rita decidió vivir en su interior, pensando que solamente ahí podía estar segura de que nada podría pasarle, ya que sentía que en el exterior, habían demasiadas agresiones, y cuando ella se asomaba a ese mundo plagado de violencia, podía percibir cómo la energía negativa que emanaba de otros seres, afectaba su estado de ánimo; llegando en ocasiones, a sufrir verdaderas crisis de ansiedad, de las cuáles quería huir inmediatamente, pero se encontraba con que la ventana que daba a su interior, había sido cerrada, impidiéndole poder entrar a esa zona que consideraba segura, acentuando esto aún más su ansiedad, misma que le hacía percibir la cercanía de un final que la hacía evocar un panorama de mucho temor.
Rita piensa, que para salir de estado de ansiedad y depresión, necesita ayuda de los especialistas en Psicología, más que los de Psiquiatría, porque asegura, que el hecho de haber estado tanto tiempo encerrada en sí misma, requiere de poder asomarse a una ventana que dé a la vida, y después, cuando exista la suficiente confianza, poder abrir la puerta para encontrarse de nuevo con la felicidad, quiere volver a sonreír y anhela recuperar su estatus de persona digna, quiere sentirse amada y respetada, esta consciente de que Dios le ha dado una nueva oportunidad para vivir, pues ha logrado mantener a raya al “enemigo” que es como le llama al cáncer que padeció hace 8 años.
Rita se encuentra en estos momentos a mi lado, se asomó a la ventana que proyecta el enfoque de mi pluma, ahora espera poder abrir la puerta con la ayuda de un buen profesionista de la Psicología, si alguien estuviera interesado en su caso, escribanos a nuestro correo, para ponerlos en contacto, desde luego, tomando en consideración de que es una persona que tiene por mayor riqueza su alma.