Los buenos amigos son realmente un verdadero tesoro, así es, tal y como lo han pregonado en todas las épocas aquellos que han tenido la dicha de conocer a alguien, que sin necesidad de buscarlo llega a su vida, atraído por la energía espiritual que desborda de su ser, y que pronto descubre, que está en la misma sintonía, la que conecta a la perfección para dar y recibir sin ninguna mala intención, por el contrario, para privilegiar las virtudes que ponen en evidencia las cualidades empáticas que consolidaran una relación.

Tengo tiempo de que vibro en el tono de la soledad amistosa, pues las buenas vibras de los que se encontraban en sintonía conmigo, se han esparcido en el universo y las nuevas fuentes de energía positiva que existen, establecieron una conexión tan inestable, que se retiraron a vibrar en un tono más bajo, aunque no por ello menos importante, pues sin tener que ser la amistad una relación indispensable, decidieron correctamente, y por ser natural, priorizar su vibración para sostener otros enlaces que requieren de fortalecerse.

Cuando se deja de ejercer la vibración positiva, destinada a la amistad, la energía tiende a transformarse, y al interiorizarse y no encontrar salida, genera algunas veces ansiedad, otras depresión, y más en este tiempo en el que se recrudecen las crisis, ya sea por factores de salud, ya por situaciones económicas y el aislamiento.

Un buen amigo en estos momentos es un valioso tesoro, porque se puede encontrar en ello la capacidad de poder contar con alguien que puede ver con objetividad lo que te está ocurriendo, y puede emanar de él un buen consejo esperanzador como muchos lo necesitan, brillante como para iluminar el camino que se oscurece por la pesadumbre, alentador y solidario que te ayuda a levantarte cuando amenazas con caer en el pesimismo.

Un buen amigo es, en estos tiempos, tan necesario como el oxígeno que puede llegar a faltarte al pensar que no existe solución para tus problemas y sientes ahogarte por la saturación de tantos pensamientos negativos que circulan y se reciben del entorno.

Vibremos positivamente, aunque la amistad sincera sea tan escasa, tal vez sea tanta la energía que liberes, que puedas incluso, atraer hacia ti al mismo Espíritu Santo para reafirmar que el mejor de tus amigos no se ha marchado y sigue junto a ti.

Correo electrónico:
enfoque_sbc@hotmail.com