Finalmente el Congreso de Estados Unidos aprobó el Tratado de Libre Comercio de América del Norte. Para los dueños del dinero de los 3 países y de otras regiones comerciales es la oportunidad para incrementar su capital en el próximo periodo que durará el acuerdo trilateral, para la clase trabajadora representa más turnos en las empresas maquiladoras, lo mismo para especialistas ingenieros, químicos y analistas de los procesos productivos. Para los políticos es la oportunidad para producir millones de metros cúbicos de saliva, ya que seguramente en los que resta de este mes, el T-MEC será medular en sus discursos, aunque no entiendan ni “papa”, respecto a las ventajas y desventajas para la inversión, el empleo, la productividad y en general para la economía mexicana.
Se prevé un incremento del flujo de inversión extranjera en los estados del norte del país en particular en la franja fronteriza de Matamoros a Tijuana. En esa misma región se estima que la competencia de la actividad primaria será dispar en particular entre México y Estados Unidos, ya que los agricultores de los anglosajones tienen subsidios incomparables con la sequia de los mismos que reciben a cuenta gotas los agricultores y ganaderos mexicanos. Hasta las ventanillas de Sader desaparecieron.
Pues además en territorio mexicano los programas de siembra Otoño-Invierno y Primavera-Verano desde hace 10 años entraron en una extinción gradual, en la mayoría de los estados productores de granos, oleaginosas, hortalizas y perenes como la caña y los cítricos.
No obstante, en el intercambio comercial los productos agropecuarios son un concepto más para los socios comerciales de los casi 1,500 considerados en el T-MEC para los 3 países, pues entre los productos destacan el aguacate, el azúcar blanco no así los granos básicos de la dieta alimenticia de los mexicanos como el maíz y el frijol.
Pero además hay algunos productos mexicanos pero que únicamente se comercializan en Estados Unidos y Canadá, quizá porque son mejor cotizados en esos dos países, por aunque hay cortes de carne de res en México hay una marcada preferencia por la carne empaquetada americana, que es una cuestión de mercado y preferencias.
Ya que ciertamente los sistemas de producción e inocuidad son más eficientes en ese país que en el nuestro, es uno de los motivos los cuales únicamente el estado de Sonora esta en la fase 1 para exportar ganado bovino y las demás entidades fronterizas están por debajo de esa clasificación, que esta en riesgo debido a la entrada de ganado centroamericano.
Bien por el Congreso de Estados Unidos y los 3 países firmantes del acuerdo comercial, pero no hay margen de comparación con los trabajos del Congreso de la Unión mexicano, mucho menos con las deficiencias del Congreso de Tamaulipas, que en los últimos 3 meses se ha caracterizado por aprobar únicamente Iniciativas de Punto de Acuerdo, pero ninguna de relevancia que implique la creación de legislaciones nuevas, como iniciativas de reforma con un enfoque social y económico.
Aunque Gerardo Peña Flores prometió que encabezaría la lucha para buscan consensos con otros Congresos Estatales para promover una Asamblea Nacional Hacendaria, tal parece que reculó de sus dichos durante el mes de Diciembre. Es Enero y es fecha que se desconoce una agenda legislativa solidad y trascendente. Lució más la 63 Legislatura que presidieron Carlos García y Glafiro Salinas Mendiola que la que preside “El Pachuco”, Peña Flores.
Los enterados aseguran que el legislador panista entró en estado de amnesia y que únicamente piensa en la candidatura para contender por gubernatura, aún cuando el proceso para esos fines arranca hasta el 2021. Es decir, ya se le queman las habas.

Segunda fase del T-MEC
Finalmente el Congreso de Estados Unidos aprobó el Tratado de Libre Comercio de América del Norte