La nueva legislatura tamaulipeca sigue siendo la protagonista de esta semana, ahora tras permitirle a Gerardo Peña tomar protesta como diputado local pese a estar inhabilitado para ejercer cargos públicos por un año.

El panista Gerardo Peña logró asumir su cargo y de paso obtener fuero, gracias a una suspensión provisional obtenida mediante un amparo judicial, lo que le permitió eludir temporalmente la sanción impuesta por la contraloría gubernamental. Ahora Peña Flores está protegido de ser procesado judicialmente por la irregular asignación de notarías y podrá hacer escuchar la voz de los pocos panistas que sobreviven de su bancada en esta nueva legislatura.

Quién no ha corrido con la misma suerte es el hermano del ex gobernador de Tamaulipas, Ismael García Cabeza de Vaca, quien ahora resulta tiene Covid y por eso no ha se ha presentado (okeey). En realidad él sigue buscando la manera de no ser detenido si se presenta a tomar protesta pues hay una orden de aprehensión girada en su contra. Trascendió en su momento que había logrado un amparo para no ser detenido sin embargo su ausencia en el recinto legislativo sigue levantando muchas sospechas.

Pero el tema ahora es otro, pues independientemente de que el PAN recupere uno de sus espacios o no, los diputados de Morena ahora pueden hacer y deshacer sin que nadie se los impida al ser mayoría en el Congreso y para muestra lo que ocurrió durante la primera sesión pública.

Durante su primer día oficial de chamba, los diputados de Morena eliminaron cualquier estorbo que pudiera venir de los alcaldes al derogar la obligación de que la mayoría de los 43 ayuntamientos locales tengan que avalar reformas a la Constitución Política del Estado. Es decir, palabras más, palabras menos, ya no tendrán que buscar el consenso de los municipios para modificar la ley; Morena podrá hacer lo que quiera con tan solo alzar la mano pues además son mayoría.

La reforma fue aprobada con 27 votos a favor de Morena, Partido del Trabajo y de los diputados del PRI, que durante la pasada legislatura se habían caracterizado por jugar del bando de los azules. Los seis diputados del PAN votaron en contra de esta reforma y los de Movimiento Ciudadano se abstuvieron de votar, ¡para eso los queríamos!.

Para su conocimiento, los diputados que dejaron pasar la reforma sin decir “pío”, fueron Mayra Benavides y Juan Carlos Zertuche de Movimiento Ciudadano; mientras que la única diputada que tiene el PRI, que se unió a Morena en esta modificación, fué Mercedes del Carmen Guillén Vicente.

Pero no crea que todos los morenos son iguales, en el ayuntamiento de Victoria el alcalde, Lalo Gattás, no ha corrido con la misma suerte pues ni los regidores emanados de su mismo partido avalaron las modificaciones que pretendía hacer en las secretarías.

Un día antes, durante la reunión previa donde se presentaron las modificaciones no pusieron oposición, pero al día siguiente, durante la sesión sorprendieron con su negativa, de ahí la creencia de que “alguién” al interior del partido le está haciendo el camino “incómodo” al alcalde de Victoria.

Gattás pretendía cambiar el organigrama, ratificar al secretario del ayuntamiento y designar nuevos funcionarios en al menos 10 secretarías, sin embargo los regidores de Morena y los de oposición se lo impidieron; ahora tendrá que jugar con las mismas cartas y dar buenos resultados a los victorenses. Mientras tanto ha decidido suspender todos sus eventos públicos hasta que se calmen las aguas.

Veremos.

Leo sus comentarios en mis redes sociales, que Dios los bendiga, gracias.