– Susana Prieto quiere ‘hueso’ grande
– Pierde Amparos el Sindicato “20-32”
– Manchan brillante papel del Canciller
– Ex Embajador, acusado de hostigador

A querer o no, el conflicto diplomático entre México y Bolivia que detonó en los últimos días de diciembre, el 30 para ser más exactos, terminó empañando la labor del Canciller MARCELO EBRARD, que casi cierra el año como “el personaje del 2019”.
Tantos “puntos” que había hecho el Secretario de Relaciones Exteriores, al convertirse en un utility, del gabinete de AMLO, al grado de ser catalogado por muchos como Vicepresidente, aunque, formalmente, en nuestro país esa figura no existe.
En junio pasado, Ebrard “se cubrió de gloria”, al menos ante los ojos de su Jefe, al contener la amenaza del Presidente de Estados Unidos, DONALD TRUMP, de imponer aranceles a todas las importaciones de México, si el gobierno de AMLO no frenaba el flujo de migrantes, en su mayoría centroamericanos, que estaban entrando por Chiapas.
Para efectos de lo anterior, Ebrard se convirtió incluso en Jefe (de facto) de la Guardia Nacional, al echar mano de más de 25 mil elementos, que formaron una especie de ‘muro humano’, en la frontera entre México y Guatemala, cuyo único objetivo era ‘atorar’ a los migrantes, que posteriormente han sido deportados.
El importante rol asumido por Ebrard en el gobierno federal, le permitió incluso convertirse en algo así como ‘fiscal investigador’, que hizo acto de presencia en el lugar de la tragedia en que murieron 9 integrantes de la familia LE BARÓN, a principios de noviembre, lo cual también le fue ampliamente reconocido.
Otra ‘bronca’ que se le vino encima a Ebrard en el cierre de 2019, fue la del ahora ex Embajador de México en Argentina, RICARDO VALERO, que un principio fue acusado de robar un libro en prestigiado establecimiento de Buenos Aires, y terminó siendo señalado como acosador sexual de menores.
Sobre esto último, ya no dijo nada Ebrard en su Cuenta de Twitter, red social a la que es tan asiduo, pero que ya no utilizó desde el 30 de diciembre. Presuntamente el Canciller fue visto vacacionando en Acapulco, gozando del sol durante la temporada decembrina.
Otra que se fue de vacaciones de fin de año, presuntamente a la nieve, en Ruidoso, Nuevo México, que geográficamente se encuentra relativamente cerca de su tierra de origen, Ciudad Juárez, Chihuahua, fue la abogada SUSANA PRIETO TERRAZAS, que al cierre del 2019, no pudo ‘hacer de las suyas’ en Matamoros, como sí lo hizo en enero, con su “Movimiento 20-32”, que propició 45 huelgas en esa heroica Ciudad.
Aquí lo hemos señalado, que la abogada Prieto Terrazas no es muy buena que digamos utilizando herramientas legales, como la Ley Federal del Trabajo, y más bien quiere arreglarlo todo a ‘gritos y sombrerazos’, y no se diga, con amenazas en las redes sociales.
Habría que anotar que Prieto Terrazas no pudo afiliar masivamente a los trabajadores de Matamoros a su Sindicato, “20-32”, toda vez que, al intentarlo, perdió el Juicio de Amparo 1342/2019, así como el 1349/2019-IV.
Asimismo, Prieto Terrazas no presentó los Requerimientos que le fueron solicitados por la Junta Local de Conciliación y Arbitraje, razón por la que se mantienen ‘empantanadas’ 30 Demandas presentadas por su Despacho.
Y eso que una funcionaria de la JLCyA, a la que Prieto Terrazas tildó de “pendeja” en su cuenta de Facebook, le dijo como subsanar la falla en los Expedientes, pero ni así pudo hacerlo correctamente.
Lo que Susana Prieto quiere en este 2020, es un ‘hueso’ más grande, que sería la Titularidad de los Contratos Colectivos de Trabajo que se firmarán en Matamoros en fecha próxima, pero si sigue haciendo las cosas como hasta ahora, capaz que se tendría que regresar por donde vino, sin lograr su propósito.
Aquí lo señalamos, que Susana Prieto hizo el negocio de su vida, al embolsarse, el año pasado, 2 millones y medio de pesos, de los 8 millones que en total pagó la empresa “T.P.I.”, por concepto del Bono de 32 mil pesos, a 400 trabajadores.
Mucho ojo a los trabajadores de Matamoros: en términos de los artículos 33, 34, 469, 987, 990, y 996, de la Ley Federal del Trabajo, no existe motivo o razón, y mucho menos obligación, de pagarle un solo centavo a Susana Prieto, dizque por “litigarles” sus casos.
Claramente lo dice dicha Ley: “El trabajador o sus beneficiarios que deban recibir alguna cantidad de dinero en virtud de Convenio o liquidación, podrían ocurrir personalmente al Tribunal correspondiente”.
En estos casos no se ocupa la intervención de un abogado, el trabajador puede acudir solo, y pedir el apoyo a la Procuraduría del Trabajo, y el dinero de la Liquidación o Convenio, será íntegro para el propio trabajador. Eso de pagarle ‘honorarios’ a Susana Prieto, por los Convenios que hacen los trabajadores con sus respectivas empresas, no está en la Ley.

CONTRAFUEGO: ¡Pónganse ‘bien pilas’!.
Hasta la próxima.