Mañana es un día crucial para la vida política, social y económica de nuestro país cuando se lleven a cabo las elecciones mas grandes de la historia. Durante la campaña en donde los distintos candidatos a diferentes puestos de elección popular buscaron de algún modo convencer a los electores de verse favorecidos con su voto, fuimos testigos de abundantes descalificaciones y pocas propuestas. Normal cada que hay elecciones.

En lo personal he considerado que los votos no se miden igual ya que cada orden de gobierno cumple con una función distinta: el ayuntamiento enfocado a los asuntos del municipio en turno, el diputado local a legislar para el Estado en turno y el diputado federal legisla a nivel nacional en leyes que impactan a toda la ciudadanía sin importar el municipio o entidad federativa donde vivamos. Este ultimo voto, como maestra, para mi se ha vuelto el voto prioritario desde mi perspectiva como trabajadora de la educación, por supuesto no le resto importancia al resto en los cuales votare como ciudadana.

Mi voto como maestra me es de suma importancia por lo que vivimos los trabajadores de la educación en el 2013. Ya he dado cuenta en anteriores columnas, la manera tan humillante en que fuimos tratados injustamente los maestros, producto de esa reforma del “Pacto por México”. Como maestra nunca más pondré mi voto en manos de quienes inventaron una evaluación de permanencia injusta y hecha con el fin de reprobar, señalar y provocar jubilaciones anticipadas, con tal de deshacerse de los maestros y poco a poco ir acabando con la educación pública.

Afortunadamente los maestros fuimos muy inteligentes cuando en el 2018 votamos por quien tomó nuestras demandas laborales y que nadie tomaba en cuenta y menospreciaba.

En el 2019, ya con una reforma educativa renovada, sin el carácter punitivo, manteniendo de manera correcta el ingreso por examen de oposición para evitar la venta de plazas, con el regreso de la plaza base a los 6 meses 1 día como lo marca la ley del trabajo y que lo habíamos perdido, ahora los ascensos se dan por experiencia laboral y capacidad, por citar algunos ejemplos de los grandes cambios y mejoras que se hicieron en el 2019 para la revalorización del magisterio, hemos recobrado la estabilidad laboral que se había puesto en juego años atrás.

Siempre recuerdo que no llevamos ni la mitad del actual sexenio federal, que se ha avanzado de manera significativa pero que aún falta mucho por hacer, pero no me desespero. Se que quizá muchos esperan cambios inmediatos y entiendo la necesidad de los mismos puesto que nos es urgente recuperar todo lo que en un sexenio nos quitaron.
Como maestra no olvido a los actuales partidos reaccionarios que no conforme en haber golpeado a sus maestros laboralmente, tuvieron la oportunidad en el 2019 de reivindicar su postura y ponerse del lado del magisterio.

Tristemente, por querer aparentar ser una oposición, mantuvieron su postura de ir en contra de los maestros.

Afortunadamente no les alcanzó al no ser mayoría. Es por eso que no pienso regalarles la mínima oportunidad de volver a agredir a los trabajadores de la educación. No pienso poner en manos de partidos como el PAN y lo poco que queda del PRI y PRD, mi trabajo, mi estabilidad laboral, mi familia. Estos partidos me han demostrado que en cuanto tengan la oportunidad volverán a las andadas y verán al magisterio como enemigos y el pretexto perfecto para desaparecer la educación pública. Una vez no pudieron hacerlo, si les damos otra vez entrada legislativa, esta vez no se van a detener. Y no habrá tiempo para quejarnos.

Y como maestra tamaulipeca, he vivido en carne propia cómo en casi la totalidad de un sexenio estatal se ha jugado con la economía del magisterio y le ha arrebatado sus conquistas sindicales. Mi voto legislativo local, no será tampoco para el PAN o el PRI, quienes demostraron en esta legislatura servir solo a los intereses del peor gobernador que hemos tenido los maestros en Tamaulipas. Hoy si invito a mis compañeros trabajadores de la Educación, a no votar por los partidos políticos que con sus acciones y hechos han demostrado ser los enemigos del magisterio. No pierdas lo que hemos rescatado. Vota también como maestro.

Reyna Campuzano Salinas, Secretaria Delegacional del SNTE, Vocera del Movimiento Magisterial de Tamaulipas (SNTE MMT). Pagina de Facebook: Reyna Campuzano Salinas. Twitter: @RCampuzano