El incremento de Inversión Extranjera Directa a Latinoamérica de 46,508 millones de dólares en 2003, pasó a 207,225 millones en 2011, ligado al ciclo de materia prima, por inversión en minería e hidrocarburos, y por demanda interna. La IED es el componente más estable de flujo de capital.
En las últimas décadas, la estructura productiva de México experimenta cambio en el que la manufactura destinada a la exportación es protagonista. Entre 2010-17, el sector manufacturero, en especial automotriz, electrónico y aeroespacial produjo 54% de IED y 85% de la exportación. En 2017, la industria automotriz registró nivel histórico de producción, exportación e IED. 9 de los 10 mayores fabricantes de esta industria y mayoría de proveedores de primer nivel mundial operan en el país en 2,600 plantas de partes, piezas y componentes, 600 de primer nivel.
En 2017, México fue séptimo productor, cuarto exportador de vehículos, y sexto productor de piezas para autos. La debilidad es la mano de obra simple, vinculada con ensamblaje, que limita la participación de empresas locales. La industria electrónica liderada por empresas extranjeras en 20 años recibió 20 mil millones de dólares en IED, que permitió exportar 66 mil millones de dólares y superávit de 2,500 millones de dólares. La dependencia de insumos y componentes importados generaba déficit. Somos segundo exportador mundial de equipo electrónico (en especial televisor), tercero de computadoras, quinto de equipo de comunicación.
La industria aeroespacial es dinámica por aumento de viajes y renovación de la flota aérea. La fabricación de aviones es en pocas empresas, pero la competencia relocaliza la producción. México es atractivo. De 1999 a 2017, la industria recibió 3,200 millones de dólares de IED y en 2017 exportó 3,700 millones de dólares con superávit de mil millones de dólares. Existen 300 empresas, la mayoría extranjera, especializada en fabricar piezas y componentes que se ensamblan fuera del país. México ocupa el tercer lugar, después de China y Estados Unidos, como destino de IED realizado por las empresas.
Entre 2005-17, la inversión europea en Latinoamérica en energía renovable es el 65% del total del sector. En telecomunicaciones, 43%, y sector automotor, 35%, superior a las empresas norteamericanas (29%) La IED en telecomunicaciones se concentra en México (6,972 millones de dólares) y en Brasil (6,394 millones) La inversión en energía renovable se concentró en Chile y México.
La inversión de cartera cayó a menos del 50% cuando se generalizó la salida de capital de los mercados en 2015, vuelve a subir en 2017 con 87,638 millones de dólares, la mitad corresponde a Argentina, lo que tiene en riesgo su economía ante una migración repentina y masiva de dólares como es perversa costumbre de quienes manejan capital golondrino en busca de dividendo rápido sin producir fuentes de empleo ni riqueza, por el contrario, provocan crisis y pobreza.