Manejo apropiado y empaque correcto reduce pérdida de fruta por golpes. El empaque primario (acolchonamiento y envoltura) y segundario (cajas) impactan la calidad de la fruta en la cadena de suministro. Mango, piña y plátano se rechazan frecuentemente luego de transporte y manejo por presentar mallugadas y golpes, daño físico o exposición a condición climática adversa que afecta la calidad. Es la mayor causa de pérdida, ocasionada por impacto, compresión y vibración durante operación, luego de la cosecha.
En las últimas dos décadas, Europa es líder en usar RPC (caja plástica reusable) en la industria de productos frescos con más de 50 millones de cajas plásticas. En Estados Unidos, Wal-Mart es líder en la transformación de cambiar la caja corrugada. Más de 150 millones de PRC se necesitarán para el Mercado de Norte América para transportar con mejor protección a productos perecederos en su protección física y control de temperatura.
Otra protección es el control de almacenamiento a temperatura baja pues reduce al mínimo la formación de cristal de hielo en los espacios dentro del empaque. Reducir la holgura del paquete y encajarlo firmemente alrededor del alimento, reduce al mínimo el espacio y minimiza pérdidas por humedad y quemadura por congelación. Si el alimento se envasa al vacío, con buen material de barrera al oxígeno, la reacción oxidativa se reduce. Si se usa un material de empaque de alta barrera de gas, la transferencia de olor de otros productos se minimiza.
La USDA Food Safety and Inspection Service desarrolló una Guía de Buenas Prácticas para Envasado y Etiquetado de Exportaciones. Aborda carnes, aves y otros productos, en respuesta a la preocupación por falta de integridad de envases y diferentes prácticas de etiquetado que dificultan la inspección eficiente y comprometen la calidad y vida del producto. Las pautas se refieren a calidad del envase, cómo cajas y paquetes deben colocarse cuando se almacena, resistencia del envase, etc. La directriz de etiquetado debe mostrar el producto; origen, fecha, destino, etc.
En cuanto al sistema de cajas y orientación del empaque en la caja, afecta el daño de perecederos, en especial frutas durante manejo y transporte. El uso de redes de esponja lo reduce en forma individual. Las cajas plásticas que apilan producto, por las que empacan los mismos en una sola capa, es la mejor opción para reducir daño a los perecederos y mejora la transmisión de calor y da vida de anaquel más extensa.
La naturaleza del producto (factor de producto), el tipo de proceso de congelación usado (factor de proceso), y la naturaleza del envase (factor de empaque),tienen efecto en la magnitud de la vida útil de alimentos congelados. Además de estos factores PPP, donde los operadores de almacén tienen poco control, el proceso posterior a la congelación tiene efecto sustancial en la vida de almacenamiento de alimentos congelados y calidad. Baja temperatura adecuada, mini ciclos de fluctuación de temperatura, contribuye al mantenimiento de la calidad. Llegar a la mesa del consumidor en las condiciones ideales para su ingesta es una mezcla de ciencia y arte.