La semana pasada, comprobamos cómo se hace la “política al estilo tamaulipeco”, al menos en un municipio fronterizo: Reynosa, convertido ahora en lo que queda de la “nueva” capital política estatal.
Dos personajes, cada uno por su cuenta, dieron de qué hablar revelando un entramado político encaminado a la persecución del poder, prácticamente a casi de lo que sea.
Los actores políticos de la trama que les comento son CARLOS “Makito” PEÑA ORTIZ y LUIS ALEJANDRO ESPINO ACOSTA.
Por un lado, están CARLOS y MAKI ORTIZ DOMÍNGUEZ, además los regidores CARLOS RAMÍREZ LÓPEZ, SALVADOR LEAL GARZA Y ANTONIO CHÁVEZ HERRERA.
En el equipo contrario están, LUIS ALEJANDRO ESPINO ACOSTA y presuntamente GERARDO PEÑA FLORES, JORGE ESPINO ASCANIO, IRVING BARRIOS MOJICA y el gobernador FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA.
Otros actores que jugaron presuntamente un “papel secundario” son GUSTAVO CÁRDENAS GUTIÉRREZ, JUAN CARLOS ZERTUCHE ROMERO, RIGOBERTO RAMOS ORDOÑEZ, MARCELO OLÁN MENDOZA y MARIO DELGADO CARRILLO.
Los mencionados y otros más que “escapan” a mi memoria, han venido tejiendo una espinosa y profundamente complicada trama política que deja ver toda la suciedad que en ocasiones se emplea para llegar al poder.
El grano lo reventaron unos audios el pasado jueves, cuya voz era de LUIS ALEJANDRO ESPINO ACOSTA, hijo del auditor superior del estado, JORGE ESPINO ASCANIO; audios que dejaron salir toda la pus y permitieron comprobar cómo se juega la política tamaulipeca.
ESPINO ACOSTA fue grabado cuando ofrecía cinco millones de pesos a un regidor de Morena, en un intento por comprar la Alcaldía de Reynosa, a través de ser propuesto en una terna, que presuntamente sería aprobada en el Congreso del Estado, ahora en manos de la bancada del Partido Acción Nacional, bajo la tutela de FÉLIX FERNANDO “El Moyo” GARCÍA AGUIAR.
Sólo que ESPINO ACOSTA, desde su ronco pecho, mencionó el nombre de su padre, JORGE ESPINO ASCANIO; del secretario general de Gobierno, GERARDO PEÑA FLORES; del fiscal IRVING BARRIOS y hasta del gobernador FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA.
A cada uno, ESPINO ACOSTA, los señaló en el audio como patrocinadores, impulsores, cómplices o quienes “palomeaban” un complejo entramado político para derrocar a CARLOS PEÑA ORTIZ, todavía Alcalde con licencia, pero prófugo de la justicia.
Los audios ahí están, así lo señaló ESPINO ACOSTA y la percepción generada en la entidad es que “sí, así se las gastan”, era lo menos que se mencionaba en las redes sociales y mensajes de texto que circularon a la velocidad de la luz, desde el pasado jueves 21 de julio.
Es escándalo cimbró todo el aparato gubernamental, la Auditoría Superior y la Fiscalía General de Justicia del Estado, que obligó, a toda prisa, que dos personajes mencionados por ESPINO ACOSTA, es decir su padre, el Auditor y el Secretario General de Gobierno, se desmarcaran de él y lo dejaran solo… Pero el daño ya estaba hecho.
Quienes escucharon la historia, se quisieron quedar con los audios y omitieron el contenido de las cartas que GERARDO PEÑA FLORES y JORGE ESPINO ASCANIO dieron a la opinión pública, para pintar su raya de la intentona inmoral y muy turbia de ESPINO ACOSTA por apoderarse de la Alcaldía, que éste tuvo que sacar un video donde aclaraba la situación.
El jueves por la tarde, ESPINO ACOSTA, desde su muro de Facebook, tuvo que sacar un video donde acepta que es su voz y que quiso aprovecharse del “vacío de poder” que hay en el Ayuntamiento de Reynosa para escalar en su carrera política, cargando con toda la culpa.
Dijo que “el tiro” se lo había aventado solo y culpó a los regidores de CARLOS RAMÍREZ, SALVADOR LEAL y ANTONIO CHÁVEZ, de haberlo grabado “sin su consentimiento”. ESPINO ACOSTA fue víctima de sus ambiciones y no tomó en cuenta que los regidores, posiblemente, quería el dinero en sus manos y no la promesa de pago una vez que se sentara como Alcalde; tal vez la que mejor les paga era MAKI ORTIZ DÓMINGUEZ… ¡calla pesáo!
El sujeto fue, hace un año, candidato del Movimiento Ciudadano, el llamado partido naranja, a una diputación local en Reynosa; su llegada a las parcelas políticas/electorales, se comenta, fue a través de desembolsar cerca de medio millón de pesos al partido que comandaba, en ese tiempo, GUSTAVO CÁRDENAS GUTIÉRREZ.
El escándalo de la compra de regidores no era nuevo, ya se había dado a conocer desde el inicio del presente mes y, el nuevo dirigente de Movimiento Ciudadano, JUAN CARLOS ZERTUCHE ROMERO, pintó su raya de ESPINO ASCANIO… Antes de los audios…
Al día siguiente de los “audio-escándalos”, (viernes 22/07/2022) el alcalde con licencia y prófugo de la justicia, CARLOS PEÑA ORTIZ, sacó en su muro de Facebook un video donde responsabilizaba directamente al gobernador, FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA, de lo que pudiera pasarle a él, a su familia, a los regidores y síndicos del Ayuntamiento de Reynosa… ¡OMG!
Dejó entrever su temor a raíz de los “audio-escándalos” de ESPINO ACOSTA, aprovechando la coyuntura y alimentando el fuego de la duda para que la sociedad crea que es un “perseguido político”.
Sólo que CARLOS “Makito” PEÑA omite algo que la población de Reynosa y los tamaulipecos conocen y es la oscura historia de cómo arrebató la candidatura a la Alcaldía a cambio de grosera cantidad de lana.
Es del dominio público que MAKI ORTIZ DOMÍNGUEZ, madre de CARLOS PEÑA, negoció con MARIO DELGADO CARRILLO, dirigente nacional de Morena, la candidatura para su hijo; algo que los propios morenos señalaron.
Esta acción pisoteó los derechos políticos de RIGOBERTO RAMOS ORDOÑEZ, como diputado local y candidato “natural” a la Alcaldía de Reynosa; pero también los derechos de MARCELO OLÁN MENDOZA, presunto sobrino del presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, entre otros morenos.
Precisamente OLÁN MENDOZA es el autor material (nadie sabe si intelectual) de la demanda que detonó la investigación y orden de aprehensión de CARLOS PEÑA por lavado de dinero y delincuencia organizada.
Demanda que se pensó “enterrarían” a cambio de darle a OLÁN la contraloría social del Ayuntamiento de Reynosa, pero los depósitos millonarios en Banregio, que hizo CARLOS PEÑA, no se pueden borrar “por oficio”; es decir que se puso “de a pechito”.
A pesar de que el CLAN PEÑA-ORTIZ y “vacas sagradas” de Morena intentan vender la idea de que CARLOS es un “perseguido político” la realidad es que MARCELO OLÁN, su hoy empleado, es quien le dio el “tiro de gracia”.
En resumen… MAKI ORTIZ, a “golpe de billetes”, se apropió de la candidatura a la alcaldía de Reynosa, pasando por los derechos políticos de RIGO RAMOS, MARCELO OLÁN y algunos morenos reynosenses más…
LUIS ESPINO ACOSTA, pretendió hacer lo mismo que MAKI, es decir apropiarse de la Alcaldía de Reynosa a “golpe de billetes”; la diferencia es que éste sólo entregó la promesa de “mamarse de lana”, es decir nada en firme para que los regidores mencionados hayan cambiado sus lealtades y evitado ser exhibido…
Reynosa ha sido, y es, un municipio en donde se practica la política con alto grado de suciedad; donde las complicidades, nexos oscuros e “innombrables” están a flor de piel.
No hay que olvidar aquella historia de TOMÁS YÁRRINGTON quien, siendo Gobernador del PRI en la entidad, le arrebató la Alcaldía de Reynosa a GERARDO HIGAREDA ADAM, persiguiéndolo judicialmente, para imponer a su compadre, HUMBERTO “El Caliches” VALDEZ RICHAUD.
En Reynosa no se gana en las urnas, se llega al poder en la mesa de las negociaciones o se arrebata en la mesa de las componendas y canonjías… La llegada de CARLOS PEÑA al poder y la intentona de ESPINO ACOSTA por arrebatárselo, así lo comprueban… Pendientes…
GRACIAS… Nos leemos hasta mañana
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