No importa lo que digas cuando estás frustrado, en tu corazón sientes que no es verdad, porque hay tantas cosas negativas que se cruzan en el camino para hacerte tropezar y hacer de tu destino un incierto despertar a otra realidad.
Las personas no siempre están en sintonía, por eso, cuando esperas de ellas una muestra de consuelo o un acto solidario y no hay respuesta, recordar debes que podrían no estar contigo como músico de la misma orquesta.
No te sientas triste por no recibir de otros lo que esperabas o querías, el pensamiento suele jugar contigo para hacerte sentir mal y resentido, piensa mejor en positivo, piensa que tal vez tu mensaje no fue bien recibido y procura hacerlo llegar de nuevo con toda claridad y no te anticipes a la respuesta deformada que tu pensamiento no desea escuchar, pero sí logró profetizar.
Recuerda que las distancias y el tiempo pueden convertirse en serios enemigos, en obstáculos para no hacer efectiva la comunicación que tu desearías, no culpes al receptor de ello, sobre todo, cuando no fueron avisados con oportunidad, para tenerte una respuesta razonada y con un toque de humildad, para que tu alta sensibilidad, no sea vulnerada por un mal entendido y te sientas ofendido por el sólo hecho de pensar mal y deformar la realidad en tu mente predispuesta.
Date siempre la oportunidad de pensar con plena conciencia, solamente así podrás apreciar las diferencias entre lo que es falso y lo que es real, no confíes de primera intensión en lo que cruce por tu pensamiento, en ocasiones, te puede ganar otra emoción muy diferente a la que tu corazón manifiesta, porque en la vida hay mucha gente predispuesta que más que buscar la paz busca la guerra.
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