Este tema se refiere que es un estado de ánimo que se hará realidad aquello que anhelamos, recibiremos o veremos tangibles nuestros sueños.

Conocido refrán dice: “La esperanza es lo último que muere”, porque mientras hay vida hay esperanza.

La esperanza se acompaña con Valores igualmente positivos como lo son la alegría, el optimismo, el entusiasmo que invade esa espera, reforzada con nuestras peticiones mediante la oración cotidiana aun Dios misericordioso todo bondad, estimulados por nuestra fe.

En nuestro pensamiento que las cosas se darán bien. Ningún mortal está exento de ser sometido a duras prueba, mas esto te dotan de un carácter que te dota de gran fortaleza la cual provocará de buscar y encontrar las mejores soluciones cuyos beneficios son más provechosos para tu integridad…

Tal situación dará la consecuencia de dar lo mejor de ti, redoblar esfuerzos e iniciar con entusiasmo cada día la que por gracia te regala el Señor.

El optimista ve con esperanza la oportunidad, para el pesimista la situación está llena de obstáculos y se siente derrotado antes del intento.

Alentemos esperanza y no dejemos de lado sueños y anhelos, así sentiremos que la vida vale la pena vivirla.

Por hoy es todo.

Hasta la próxima. Carpe diem.