Aunque quise constituir en el título una metáfora, lo cierto es que como dicen los chavos ahora, Victoria está tan mal, que “literal” parecen producto de una borrachera las decisiones que han tomado el ex edil y la sustituta, cuya resaca la padecemos los victorenses.

Ahora una vez más entre semana presidió la sesión de Ayuntamiento el regidor Edgar Valdez, lo he dicho y reitero: no tengo nada en contra del citado representante popular, pero, ¿Dónde está Pilar?

El cuatro veces sustituto de la sustituta volvió a asumir por un rato las riendas de Victoria. Vaya borrachera política.

Y es que, no es retórica política. El 115 constitucional determina que al Municipio le corresponde el agua potable, drenaje, alcantarillado y tratamiento y disposición de aguas residuales; asignatura que claramente está reprobada.
Le confiere el servicio de alumbrado público, materia sin duda reprobada también.

Señala el propio numeral que el servicio público de limpia, recolección, traslado, tratamiento y disposición final de residuos es función municipal, cuestión que hoy es el tema de temas en la capital de Tamaulipas, y está absolutamente reprobada su atención.

El mismo 115 expresamente dispone que los mercados y centrales de abastos, panteones, parques y jardines y su equipamiento son rubros de servicios públicos que recaen en el municipio, y todos, qué pena, pero que alguien me desmienta, caray, están reprobados. De seguridad y tránsito mejor ni hablamos. No sirven ni los semáforos, hombre.

Entonces, no responde el Municipio de Victoria, son 3 años perdidos en la historia. Me pregunto: ¿Qué hará Xico acabando su encargo como Subsecretario de Salud? ¿Dónde vivirá Pilar a partir del 1 de octubre? Por su grado de indiferencia y desfachatez por aquí andarían, aunque la presión social aunado a su desprecio por la cuidad seguro los orillará a retirarse a un lugar en donde haya mejores servicios públicos.

Además de que no se cumple a cabalidad con ninguna de las obligaciones constitucionales, Victoria se volvió una isla. Estamos aislados de todo, y secuestrados.

A 104 años de que se aprobó el 115 constitucional que instituyó al Municipio Libre en México, la realidad es que Victoria, Tamaulipas, de facto no goza de tal logro constitucional. De no ser así Xico no sería subsecretario en el gobierno estatal y la sustituta no sería familiar del personaje desaforado.

Es muy lamentable lo deplorable que está la ciudad hoy, pero la rabia da por la indiferencia gubernamental, producto de las borracheras administrativas de Xico y Pilar en la isla Victoria.

Faltan más de 70 días para que concluya la administración, y no se sabe dónde estén Xico y Pilar hoy, pero no sorprendería que de vacaciones, a pesar de ser los responsables del estado que guardan los servicios públicos en Victoria.

De vacaciones, sin ni siquiera responderle a los familiares de los fallecidos en la tragedia de COMAPA…

Ojalá pronto la Suprema Corte de Justicia de la Nación resuelva de manera favorable para los intereses de la historia de Victoria y de Tamaulipas, la Controversia Constitucional 164/2020 que promoví en representación de los victorenses contra la imposición del Gobernador y del Congreso, de Pilar Gómez como alcaldesa sustituta.

Es cierto, eso no resuelve de fondo el problema de servicios públicos que tenemos, pero pavimenta el camino de un ‘hasta aquí’ a los Gobernadores que vengan, para que respeten la autonomía de los ayuntamientos, y pueda Victoria ser realmente un Municipio Libre.

En fin, también a partir de octubre llegará una nuevo presidente municipal, esperemos sea más independiente y digno, para que no caiga Victoria en otra borrachera administrativa ya que es la cuidad la que padece la enfermiza resaca.