La realidad muestra que Peña Nieto tiene un tiradero en la economía nacional si tomamos en cuenta que más de la mitad de los mexicanos están en situación de pobreza, resultado de disminuir el gasto público en servicios y obras sociales, salud, educación y vivienda; hacer de México un atractivo para inversores extranjeros sobre base de mano de obra barata y de continuar ejerciendo un gasto público sin control e incrementando de manera salvaje y riesgosa la deuda externa que ya cuesta la mitad del presupuesto nacional anual.
Los Informes de Finanzas Públicas y Deuda Pública a abril 2017 son reveladores: el Saldo Histórico de Requerimientos Financieros del Sector Público (SHRFSP), la medida más amplia de la deuda pública es de 9 billones 243 mil millones de pesos, mientras que en el mismo lapso de 2016 era de 8 billones 570 mil millones, un incremento de 673 mil 800 millones de pesos, a los cuales debe sumársele el préstamo solicitado y aprobado la semana anterior.
Mientras el endeudamiento del sector público entre enero y abril de 2017 se incrementó 7.4% en términos reales respecto del mismo lapso del año anterior, el monto por los intereses, comisiones y gastos de la deuda se elevaron 42.6% en comparación con el mismo lapso del año anterior, ocasionado por la depreciación cambiaria y el aumento en las tasas de interés. Datos de la Secretaría de Hacienda muestran que el monto de los intereses, las comisiones y los gastos de la deuda pasaron de 32 mil 817 millones el primer cuatrimestre del año pasado, a 49 mil 240 millones en el mismo periodo de 2017.
A pesar de que los informes señalan que en enero-abril 2017, los ingresos presupuestarios aumentaron 8.2% respecto del mismo periodo de 2016, el gasto público se redujo. El gasto programable se ubicó en un billón 140 mil 951 millones de pesos, monto inferior en 79 mil 631 millones de pesos al planeado. Comprende todo recurso que ejercen las secretarías, ramos autónomos (Legislativo, Derechos Humanos, Electoral y Judicial), IMSS, ISSSTE, Pemex y CFE. Al compararse con el gasto ejercido en el primer cuatrimestre de 2016, el gasto programable es 7.8% menor en términos reales, destacando el caso de las secretarías y dependencias federales, que han gastado 20.7% menos.
La reducción del gasto público es la causa de la cancelación de obras, de la mala prestación de los servicios médicos en el IMSS y en el ISSSTE. Explica la falta de medicamentos, el nulo mantenimiento a la infraestructura productiva del país en PEM0045 y CFE. Aun adquiriendo crédito externo; gastando menor presupuesto en prestaciones de bienestar social no hay ahorro nacional; el gasto público se ejerce y los mexicanos no vemos obras que fundamenten semejante gasto público de 9 billones de pesos anuales más ingresos adicionales por Banco de México y por los créditos externos que se continua adquiriendo, lo que deja de manifiesto que la docena de gobernadores y ex gobernadores enjuiciados e investigados por enriquecimiento ilícito y fraude a la nación, que extrajeron con impunidad dinero de manera directa del presupuesto, sin ejercer, simplemente lo transfirieron a cuentas privadas son aprendices de los ladrones que encabezan el Estado Mexicano. El país de cabeza sin autoridad legítima en el gobierno y sin autoridades legítimas en política para aspirar a un cambio favorable parta el país que está pleno de violencia por pleito de territorios por el crimen organizado y por las crecientes bandas delincuenciales que atacan al ciudadano que el Estado mexicano tiene en estado de indefensión.