La realidad supera al marco jurídico en prevención y erradicación del trabajo infantil. En nuestro país, con carencias tan importantes, 2.5 millones de menores laboran, abandonando sus estudios para caer las adicciones y en la delincuencia organizada. Hace falta contribuir a la erradicación del trabajo infantil y con leyes que reintegren a los niños a la escuela o evitar que la abandonen y establecer mayores sanciones a quienes empleen a menores de 15 años.
El 50% de los menores que trabajan en la Ciudad de México provienen del Estado de México. El trabajo infantil está ligado a la pobreza, por lo que en muchos casos se debe a una necesidad económica, complemento al apoyo familiar, sin embargo lo que aporta un niño a la economía de la familia no mejora el nivel de vida. En el mundo, 168 millones de infantes entre 5 y 17 años trabajan.
Se les cancela su derecho a ir a la escuela, ponen en riesgo su salud al estar expuestos a condiciones de violencia y explotación, privándolos de su infancia, desarrollo y bienestar. Más de 11 millones laboran en el servicio doméstico, niñas expuestas a la explotación y el abuso sexual. Estos niños producen en agricultura, pesca, caza y silvicultura.
Viven lejos de sus hogares, de clínicas, sin protección. Los que laboran en manufactura (7%), están expuestos a condiciones peligrosas, igual en canteras y minas, con largas horas y cargas pesadas que les ocasionan deformaciones físicas, problemas de salud y la muerte. En 2013, 2.5 millones de niños y adolescentes entre 5 a 17 años, realizaban alguna actividad económica; de estos, 40% tenía entre 5 y 14 años. El porcentaje de niños que recibe hasta un salario mínimo es de 27%.
La Organización Internacional del Trabajo exige a los países medidas inmediatas para asegurar la prohibición y eliminación de las peores formas de trabajo infantil y estima que en 2025 se logre erradicar este tipo de empleo.
Helmut Schwarzer, (Organización Internacional del Trabajo para México y Cuba), dice que en México hay una tasa del 8.4% en trabajo infantil, por encima de la media en el continente de 7.6%. Mencionó que en América Latina, entre 2000 y 2012 se redujo en 7.5 millones los menores trabajadores.
En América Central en año 2011 la tasa era 8% ciento, en el Cono Sur, 5.5% y en la región Andina, 12%. Los factores que permitieron la reducción del trabajo infantil son, la pirámide demográfica se revirtió, y se implementaron políticas públicas para la promoción de la asistencia escolar y el combate a la pobreza.
La Secretaría de Trabajo y Fomento al Empleo opina que la escuela de tiempo completo es una herramienta valiosa para reducir el trabajo infantil al permitir que niños en entorno familiar, con condición económica precaria, estén en un entorno donde se brinde alimentación, educación, atención en su salud, acceso a material escolar y uniformes.
En la Ciudad de México se redujo 15% el trabajo infantil, al pasar de 85 mil niños documentados por la Secretaría de Trabajo y Prevención Social a 70 mil. Un millón de niñas y niños de 5 a 17 años de edad trabajan en el país. 70% son niñas de zona rural en trabajo doméstico.
El Convenio 138 de la OIT, permite laborar entre 15 a 16 años, sin embargo se viola en todo el país. La subdirección de Protección Laboral Infantil (Secretaría del Trabajo y Previsión Social), dice que en la medición 2015, la tasa de ocupación laboral infantil no permitida era 7.5%, poco más de 2 millones 217 mil menores. De esta cifra, 29.8% trabaja en el sector agropecuario, 25.3% en servicios, 22.6% se dedica al comercio, 13.8% en industrias, 6.7% en la construcción, el 1.8% restante en actividades no específicas.
¿Queremos que los niños mexicanos estén trabajando, explotados o reciban educación integral? Recuerde que la educación es el camino de la superación.