Ese término que choca a muchos y que cariñosamente nos marca como personas con gordura, sobrepeso, obesidad o como le quiera usted llamar, pero que tiene que ver con el incremento en las tallas de ropa, en más agujeros del cinturón y sobre todo, en más dificultad para moverse, amarrarse los zapatos o correr, amén de lo que sucede dentro de nuestro organismo que resulta punto menos que fatal.

El peso de más en el organismo está clasificado por los expertos como sobrepeso, obesidad y obesidad mórbida: de acuerdo al volumen que tengamos de más es el grado de “gordo” que estemos, y que muchos de los nuestros, cariñosamente ocultan con las palabras “Te ves muy repuestito”, o “Qué bárbaro, estás más llenito”, por no decir el término que choca: gordo. Y somos curiosos: no nos gusta que nos digan gordos, no nos gusta la obesidad, pero poco hacemos por evitarla, y en ese sentido, hay muchas cosas que tenemos que trabajar dentro de nosotros, y que requieren una gran voluntad al respecto: educación alimentaria.

Y en ese sentido, tenemos en la entidad suficientes escuelas de nutrición que por consecuencia han arrojado una cantidad importante de profesionistas dedicados a enseñarnos a comer, y a controlar esos kilos de más que, insistimos, no son solamente cuestión de estética, sino de salud pública, porque los obesos y los del sobrepeso conforman una franja muy importante dentro de la población en México, en el mundo y obviamente, en Tamaulipas.

La Secretaría de Salud en la Entidad tiene en sus instituciones médicas personal capacitado para apoyarnos: en el IMSS y el ISSSTE también tiene personal de este tipo, y si no acudimos es porque no nos gusta “perder el tiempo”, ya que poco o nada hacemos por mejorar. Insistimos mucho en la idea de las autoridades sanitarias de cuidar nuestro peso por salud y no por estética.

En ese sentido, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Alejandro García Barrientos, es enfático en señalar que tenemos que tomar como serio este asunto, porque si no lo hacemos de esa forma, podría convertirse en uno de los más importantes y principales enemigos de nosotros mismos, y lo que es peor, llevamos en el “tren” a la familia misma.

Sí, claro, llevar un tipo de alimentación adecuada cuando no se tienen los recursos necesarios, cuesta y mucho: el hecho de no comer lo que debemos porque en casa hemos llevado alimentación distinta, o de no saber con qué combinar qué alimento surge como un problema serio, y optamos por lo fácil o porque pretextamos no tener tiempo para cocinar y le damos vuelo a la comida chatarra, que es más rápida y fácil.

Cheque usted en todas las instituciones educativas de todo nivel: gorditas, flautas, lonches, tacos… poco o nada nutritivo y sin la bomba de carbohidratos que implica tres o cuatro deliciosas flautas de tortilla de harina, o unas ricas gorditas que lo delicioso no le quita el exceso de grasa y más.

Insiste García Barrientos en que tenemos que incrementar acciones para cuidar la salud, y la nutrición resulta fundamental para evitar sobrepeso, obesidad, e inclusive ayuda mucho a retrasar o evitar diagnósticos como el de diabetes mellitus o hipertensión arterial que tanto daño hacen a México y que se han incrementado notablemente.

Dice el subsecretario García Barrientos que tenemos que entender que cuando alguien nos diga que estamos gorditos, llenitos o como sea, es momento de actuar.

Pero mire, siendo honestos: no necesitamos esperar a que alguien nos vea el brillo en las mejillas: cuando a usted la aprieta el pantalón o la blusa de siempre, no hay duda, tiene usted sobrepeso, está gordo o gorda, y crudamente tiene que pensar en cuidar su salud. Olvídese de bonitas frases para el “llenito”.

Cuide su salud que es el mayor tesoro que puede tener un ser humano. La obesidad nos está matando por miles en el mundo: evitemos ser una víctima más de este grave problema de salud pública.

Comentarios: columna.entre.nos@gmail.com