En el sector que atenderá el nuevo secretario del trabajo en Tamaulipas, Luis Gerardo Illoldi, se estarán encarando inevitables contradicciones y desafíos, por lo que hay buenas y malas noticias.

La buena noticia: La ocupación y el empleo durante el año pasado creció en forma extraordinaria, según el INEGI, el empleo formal e informal en Tamaulipas creció en 36,234 personas, cifra que se encuentra por encima del crecimiento generacional de la Población Económicamente Activa.

Otra buena noticia es que la ocupación de las personas con un nivel de instrucción Superior creció en 46,218, cifra que excede a los 31,065 egresados de las universidades y tecnológicos de Tamaulipas en el 2023.

La mala noticia: Que los empleos en el sector formal solo crecieron el año pasado en 1,406, por lo que los empleos que ocuparon los profesionistas y técnicos fueron, en su mayor parte, empleos informales con ingresos de menos de dos salarios mínimos (entre $7,468 y $14,935.8 al mes), este grupo aumentó en 29,849 personas en el año 2023. Y los de empleos precarios, que ganan menos de un salario mínimo crecieron en 20,277.

En Tamaulipas, el conjunto de la población con ocupación de ingresos menores a los $14,935.8 al mes, integra al 76% del total de la población ocupada y suman  1’260,900  personas, la mitad en la formalidad.

El grupo de ingresos medios de dos a cinco salarios mínimos, entre 15 mil y $37,339, en donde deberían ubicarse los técnicos y profesionistas suma un total de 177,293 personas, de los cuales el 69.8% son hombres. Este conjunto apenas y creció el año pasado en 4,389 personas.

Por lo tanto, el mayor reto será mejorar la calidad del empleo y cerrar la gran brecha entre los ingresos de los hombres y mujeres abriendo espacios laborales con mejores sueldos a las egresadas de las universidades.

Cuando analizamos el empleo por actividad económica, observamos que la industria de transformación está dejando de ser “el motor del empleo”. El empleo en la industria crece más lentamente.

En los últimos diez años las actividades industriales han generado en promedio por año de 7,772 empleos, sin embargo, en los últimos cuatro años, es decir en el año previo a la pandemia, hasta el 2023, no solo no se ha creado un solo empleo, sino que se han reducido en 1,748 los puestos de trabajo.

Este fenómeno no se puede atribuir a una situación especial de Tamaulipas, algo muy similar ha ocurrido en todos los demás estados fronterizos, excepto por Coahuila y Nuevo León que tienen un parque industrial mejor integrado que los estados maquiladores.

Después de la crisis del 2008-09, en el que en Tamaulipas se perdieron 38,029 empleos industriales, incluso más que en durante la pandemia, se inició un proceso de cambio tecnológico que se muestra en los datos de la industria maquiladora en el país el año pasado, en donde a pesar de un crecimiento de 94 plantas instaladas, la cantidad de trabajadores y horas trabajadas se redujo en 1.3%, alrededor de 42,500 personas menos.

En Tamaulipas, en los últimos diez años, la industria generó el 65% de los nuevos empleos formales, sin embargo, en los últimos seis años bajó al 43%, en cambio las actividades logísticas del transporte y almacenes generaron el 70% del total de nuevos empleos.

Lo anterior se debe a la incorporación de las mejoras tecnológicas de la 4ª Revolución Industrial, que están conduciendo al desplazamiento del trabajo por la automatización de los procesos, el internet de las cosas y la datificación de la economía.

La misma encuesta de ocupación y empleo del INEGI, nos indica que el año pasado, la industria sufrió la pérdida de -27,642; el crecimiento se dio en el sector logístico de Transportes y comunicaciones, donde se observó un incremento de 25,645 y otro tanto igual entre los servicios para empresas y el comercio.

Los anteriores fenómenos son desafíos para el empleo y los salarios, que se traducen en demanda de justicia laboral por los despidos y cambios en las condiciones laborales; y el reto de reducir la brecha de género en la calidad del empleo.

Para ser atractivos a la inversión generadora de empleos de calidad, se necesita mejorar nuestra productividad laboral, mediante la capacitación y la educación digital, que nos prepare para operar las tecnologías de la revolución industrial 4.0 y; para proteger el empleo de técnicos y profesionistas, abriendo más puestos de trabajo calificado se requerirá reducir la jornada laboral.

Numeralia:

  • Huelgas en Tamaulipas en los últimos 10 años: 5
  • Huelgas en el 2023: 3
  • Empleos por género en el 2023 de menos de un salario mínimo:

Mujeres= 20,633; hombres= -356.

Fuente: INEGI-ENOE; STPS / IMSS; SET, ANUARIO DE LA ESTADÍSTICA EDUCATIVA DEL ESTADO DE TAMAULIPAS.