Volvimos a recorrer la carretera ribereña, de Nuevo Laredo hasta Reynosa, el miércoles, a sabiendas de que sigue siendo una ruta suicida por el abandono de las autoridades. El trayecto fue tranquilo, con apenas unos sobresaltos. Al día siguiente, volvió a ser zona de guerra.
No vimos patrullas en el desplazamiento desde el entronque carretero de Nuevo Laredo hasta ciudad Miguel Alemán, ni federales ni estatales, aunque sí un convoy de cuatro vehículos militares, a la altura de San Ignacio.
Nos encontramos en ese lapso de alrededor de una hora, a una treintena de automóviles, catorce camiones, dos autobuses de pasajeros, cinco rancheros entrando a brechas. Ciudad Miguel Alemán muestra un escenario menos riesgoso pues el tendido asfáltico se hace más ancho, desde allí hasta llegar a Reynosa.
Un reciente informe de Egidio Torre Cantú daba cuenta de que había concluido el proyecto de modernización de la carretera ribereña emprendido en el gobierno de Tomás Yarrington Ruvalcaba. Es mentira, faltan los acotamientos desde Alemán hasta Nuevo Laredo.
El jueves, delincuentes volvieron a hacer sonar sus potentes armas de fuego en Miguel Alemán, Camargo, Díaz Ordaz. Fotos subidas a redes sociales muestran vehículos agujereados por proyectiles de plomo, cadáveres regados y uniformados con actitud vigilante y los dedos nerviosos sobre los gatillos.
Hubo episodios de violencia en Reynosa, Río Bravo, El Empalme, Matamoros y en Ciudad Victoria, aunque no hay confirmación gubernamental.
La más reciente ocasión que viajamos por la ribereña fue cuando el Gobernador Eugenio Hernández Flores inauguró en Ciudad Mier cántaros monumentales en las respectivas entradas, para darle atractivos turísticos a ese Pueblo Mágico. Hace ya casi diez años.
Mier era la ciudad de los arcos, grandes estructuras de ladrillo y cemento, que daban la bienvenida a los visitantes, aunque la voz de la calle distorsionó el sentido de la frase, convirtiéndola en “la ciudad de los narcos”.
Sigue siendo Mier una ciudad fantasma, pues la gente no regresa a sus casas porque no hay actividad económica, lo mismo ocurre con Nueva Ciudad Guerrero, donde sólo se quedan los que no tienen dinero para empezar una nueva vida en un lugar seguro.
(Los cántaros inaugurados por Eugenio escurrieron agua sólo ese día, pues el entonces titular de Turismo, Javier Villarreal Terán, habilitó una bomba que funcionó unas horas y luego se regresó).
La carretera ribereña sigue siendo una tierra de nadie, al menos de Ciudad Miguel Alemán para adelante, rumbo a Nuevo Laredo, no tanto porque no se haya limpiado de delincuentes, sino porque el gobierno no ha inyectado vitalidad económica, vaya, ya ni siquiera reparten despensas.
Falta allí un programa integral de rescate, repoblación y refundación de negocios con dinero a fondo perdida y créditos blandos. Las ruinas de lo que fueron tres gasolinerías, en esa ruta, retratan el desamparo oficial.
Si hubiera voluntad política…
En otros temas, la UAT consiguió una recolección de más de cien mil piezas de apoyo para damnificados, contando alimentos, ropa, medicinas, artículos de aseo y hasta una cocina llamada sartén solar, que serán enviadas las zonas de desastre.
“Universitarios Unidos por México” instaló centros de acopio en todas las escuelas de la UAT y con la colaboración de estudiantes y docentes, reunieron la impresionante cantidad de ayuda para los damnificados de los temblores.
También en Río Bravo están apelando al altruismo de la gente, para ir en auxilio de los mexicanos que han perdido sus pertenencias en el sismo. La señora Rosalva Viera de Guajardo encabeza la colecta, secundada por Juan Diego Guajardo Anzaldúa.
Rosalva hizo un llamado a los ciudadanos para que se sumen a esta campaña acudiendo a las instalaciones del DIF para entregar algún tipo de ayuda. Lo colectado será enviado al DIF de Tamaulipas que maneja la señora Mariana Gómez de García, para que la hagan llegar a los damnificados.
Se pide especialmente alimentos no perecederos, agua embotellada, biberones, productos de aseo personal, pañales para niños y adultos, ropa, etcétera.
Por cierto, el presidente de la CANACO de Matamoros, Osvaldo Castillo Hernández, denunció que funcionarios de la aduana están desatendiendo la instrucción presidencial, de conceder facilidades para el ingreso a México de ayuda dada por extranjeros.
El representante del comercio organizado fronterizo reveló hasta nombres de un funcionario, femenino, que devuelve hacia Estados Unidos a residentes de ese país que han pretendido cruzar para entregar aquí ayuda para los damnificados del temblor.
Sobre el mismo tema, la presión de la Opinión Pública hizo posible que los partidos políticos y el mismo gobierno, dieran marcha atrás en su decisión de gastar casi siete mil millones de pesos en campañas electorales, pues accedieron a regañadientes a entregar parte de ese dinero para la reconstrucción de las zonas devastadas.
Andrés Manuel López Obrador y su MORENA contribuyeron en mucho a conseguir este éxito ciudadano, con el anuncio de que darían un porcentaje de las prerrogativas políticas, para los damnificados.
Los otros partidos lo satanizaron, ridiculizaron y acusaron de lucrar políticamente con esta desgracia, pero más adelante tuvieron que hacer lo mismo que el rayito de esperanza, porque se trata de un dinero que ni merecen y tendrá mejor uso en la causa humanitaria.
Acción Nacional dará el mismo monto que MORENA, el 50 por ciento de su dinero; el PRI sólo el 25 por ciento, y Movimiento Ciudadano, de Dante Delgado Rannauro, ¡el 100 por ciento!
El coordinador del Movimiento Ciudadano en Tamaulipas, Gustavo Cárdenas Gutiérrez, permanece en la Ciudad de México atendiendo una brigada de apoyo a tamaulipecos residentes allá.
Enrique Ochoa Reza cometió otra humorada tipo Clavillazo, cuando hizo el anuncio de la cesión del 25 por ciento de sus prerrogativas, pero exigiendo al INE que la entrega se haga de inmediato, ya, ahora, hoy hoy hoy.
Las prisas hicieron cometer al presidente nacional del PRI, el error de perder de vista, que ese dinero todavía no existe, porque se tomará del presupuesto federal de 2018, aunque el Secretario de Hacienda, el delfín Meade, comentó que revisan si se puede hacer el desembolso con cargo al presupuesto 2017, lo que sería una burrada.
En otros temas, la Secretaria de Salud Gloria Molina se vio obligada a salir al paso del chisme del día, de que renunciaría o la echarían, supuestamente porque perdió la batalla contra el dengue y asociados, así como por el crónico desabasto de medicinas e insumos de curación.
Gloria ya no sale de Reynosa y la dependencia está suelta, con muchas grillas y golpes bajos.
En la jurisdicción sanitaria número 1, por ejemplo, el anterior titular, Jorge Córdova Castillo, no se resigna a haber sido despedido y mueve resortes para estorbar la gestión del médico Alejandro Cárdenas Anzures, que enderezó la nave.
Cumplió años el periodista victorense Melitón Guevara Castillo.
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