En el Imperio con Agustín de Iturbide, la paridad estaba en $0.97 pesos por dólar y se mantuvo hasta 1875. En 1899 el peso mexicano se cotizaba frente al dólar en $2.08. Para 1910 bajó a $2.01. La estabilidad terminó con la Revolución. La poca confianza en el peso y la inestabilidad social y política propias de un movimiento armado, fueron las causas de que su valor se cotizara en $23.83 pesos por dólar en 1916. Al estabilizarse la situación política, el peso se situó en un rango de entre $1.81 y $2.12 por dólar, en el periodo de 1917-30.
Con Lázaro Cárdenas (1934-40), de $4 MXP a $4.21. Con Ávila Camacho (1940-46), de $4.85 MXP a $6.68 MXP. Con Miguel Alemán (1946-52), de $6.68 MXP a $8.65 MXP. Con Ruiz Cortines (1952-58), de $8.65 MXP a $12.50 MXP. A mediados de los 50s se consolidó el milagro mexicano. El PIB creció 6.5% anual, la población al 3%, y el tipo de cambio se estabilizó durante 20 años.
Desde Luis Echeverría (1970-76) al final del sexenio de López Portillo (1976-82), el tipo de cambio pasó de $12.50 a $2,290. De 1983-93, (De la Madrid-Salinas), se reemplazó la moneda por el «nuevo peso», así, 1,000.00 pesos se convirtieron en 1.00 nuevo peso. El cambió llegó hasta $1.00 usd a $12,290. Con la conversión el tipo de cambio cambió: Carlos Salinas (1988-94), de $2,290 a $3,410.00 MXP o N$3.41 MXN. Con Zedillo (1994-2000), pasó de $3.41 al inicio a $9.36 al finalizar. Con Vicente Fox (2000-06), pasó de $9.36 a $10.88. Con Calderón (2006-12), de $10.88 MXN a $12.962. Peña Nieto (2012-18), de $12.962 a $20.453. En el gobierno de López de $20.453 a $ 19. Significa que, desde 1910 hasta hoy, el peso se ha devaluado 10,250% respecto al dólar, aunque el manejo económico federal actual revaluó el peso de manera importante.
Causas de la devaluación: Elevada inflación por emisión de dinero no respaldado por producción del país, caída de las reservas internacionales. Endeudamiento excesivo del gobierno. Aumento excesivo del gasto público. Política económica incorrecta. Inseguridad macroeconómica. A pesar de que el presidente en turno al cual se le devaluó el Peso contaba con técnicos conocedores de finanzas, no hacían caso y continuaban su gusto por gastar lo que no se tiene. Consecuencias: Al no existir política económica sustentable, grandes capitales emigran a países donde existe moneda estable. Inestabilidad social, pérdida del poder adquisitivo y devaluación.
Hay pequeñas áreas de ganancia con una devaluación: rinden más las remesas, crece el turismo extranjero que vacaciona donde vale más su dinero. Incremento en exportaciones al volverse más atractivas las mercancías nacionales en el extranjero. En contraparte, la deuda externa se incrementa pues se contrae en dólares. La actual paridad del Peso reduce el monto de pesos por cada dólar de deuda a pagar