Durante muchos años en México, se ha manejado la narrativa de ideas económicas como la fórmula mágica del desarrollo económico y del bienestar social, sin embargo, sostengo que el escenario que más favorece el incremento de la riqueza y la mejora del bienestar de la mayoría de la población en el largo plazo, es la dialéctica que se crea cuando hay rotación en el poder (entre partidos de izquierda y derecha).

Para lograr entrar en detalle deberíamos de definir primero ¿Qué es crecimiento económico de desarrollo?, para Keynes “es un proceso de crecimiento económico sostenido que va acompañado de redistribución del ingreso. El desarrollo, es un concepto que trasciende el crecimiento económico y que supone una mejora generalizada de las condiciones de vida de la población”. En segundo lugar, debemos de generalizar que lo que prioriza un partido de izquierda es la distribución del ingreso, mientras que un partido de derecha jerarquiza la búsqueda del crecimiento de la economía. Y en tercer lugar asumimos que altos niveles de desigualdad obstaculizan el crecimiento económico. Por lo tanto, para lograr el objetivo se debería de buscar un equilibrio entre crecimiento e igualdad.

Donde ha gobernado la izquierda por muchos años vemos que se termina fortaleciendo los mecanismos de protección social y los niveles salariales. Esto termina a la larga, conspirando contra el ahorro interno, la inversión, la competitividad económica y la tasa de crecimiento. El descontento del votante tiende a crecer hasta que termina optando por votar por un partido de derecha que le ofrece políticas orientadas a relanzar la economía. Así mismo, la acumulación de gobiernos de derecha estimula la liberación económica y el debilitamiento de los mecanismos redistributivos y de la intervención del estado para garantizar ciertos niveles de acceso a la educación, salud y protección social. Y otra vez, el descontento social lleva a que crezca el impacto potencial que tienen las políticas redistributivas asociadas a la izquierda.

En conclusión, para lograr entrar en un circulo virtuoso que nos lleve a un desarrollo óptimo dentro del estado de bienestar, es imprescindible que la rotación política dentro del país sea posible. Esto requiere de elecciones libres y de un sistema democrático que funcione. También es necesario que las políticas públicas de partidos de izquierda prioricen la igualdad y que los partidos de derecha maximicen la búsqueda del crecimiento. El desarrollo requiere democracia y sistemas de partidos portadores de preferencias estables y diferentes en el plano de las estrategias de desarrollo.

Desde este enfoque propongo que olvidemos las ideas económicas y mejor se instale en los debates públicos, como construir instituciones democráticas sólidas, sistemas de partidos institucionalizados y ciudadanos capaces de ejercer sus derechos políticos