México ocupa el lugar 105 en materia de corrupción mundial con 34 puntos de 100. Dinamarca, Finlandia y Nueva Zelanda, tienen 90. México está a la altura de Argelia, Bolivia, Gambia, Kosovo, Filipinas (Transparencia Internacional)
Corrupción es el uso ilegítimo del poder público para beneficio privado. Uso ilegal o no ético de la actividad gubernamental como consecuencia de consideración de beneficio personal o político, al igual que la actitud negativa que adoptan funcionarios públicos en su comportamiento ante la sociedad. En México, la revolución deviene en un régimen presidencialista que permite al funcionario toda componenda, se institucionaliza la corrupción. La etapa de crecimiento económico y de desarrollo en la cual la población se benefició, impidió ver errores de burócratas y funcionarios. Se otorgó al funcionario poder sobre documentos, sellos, formatos y papelería, que controló en su beneficio.
La corrupción es abuso de poder, tráfico de influencia, compadrazgo, soborno, amiguismo, cohecho, mal uso de los conocimientos, fraude, obsequio a cambio de favores, es corrupción administrativa que afecta a la burocracia. La llegada de un partido dominante formó un esquema de control y prebendas, roto por la alternancia en el 2000, que suponía un cambio que no llegó. La corrupción continuó y las medidas para atacarla, inefectivas.
El mundo empresarial dice que la corrupción es el factor más difícil para hacer negocios en México, otro, la inseguridad. Una de cada 5 empresas admite que el soborno asegura su negocio. Soborno, cohecho, tráfico de influencias, quebranto patrimonial y prácticas corruptoras equivalen al 9 % del producto interno bruto. A nivel empresa las compañías gastan 10% de sus ingresos en sobornos, práctica en la que incurre el 70% de empresas. La mayoría de las dependencias públicas hacen lo posible por evitar licitación pública y privilegian la adjudicación directa o invitación restringida, por margen de maniobra y discrecionalidad. La Ley de PEMEX establece un régimen de excepción para la compra de bienes y servicios sin control del Congreso de la Unión. No requiere de la Ley de Adquisiciones, el artículo 57 de esa Ley lo permite para cualquier producto relacionado con la exploración, la producción y la refinación.
Transparencia Internacional, señala que contratos de obra y construcción son más proclives al soborno en el ámbito público y privado. Soborno y corrupción hacen tomar decisiones erradas, desvían el dinero de los contribuyentes, debilitan la posibilidad de crecimiento de los países, y afectan la calidad de los proyectos pues se incumplen estándares de seguridad.
En contraste con la pasividad de mexicana, el Departamento de Justicia en Estados Unidos, investiga compañías trasnacionales implicadas en prácticas corruptas. Decenas de ejecutivos de trasnacionales se declaran culpables de práctica corrupta para obtener contratos de servicios y obra pública; evadir impuestos o trámites aduanales; regalar inmuebles, automóviles, yates, viajes; entregar fajos, bolsas y autos repletos de dinero; consentir a funcionarios con el pago de sus tarjetas de crédito, abasto de guardarropa, cirugías estéticas, pago de lunas de miel, servicios sexuales. Walmart incurrió en soborno por 24 millones de dólares para dominio del mercado mexicano. A las empresas declaradas culpables de soborno trasnacional el gobierno de Estados Unidos les impuso multas millonarias que ingresó a las arcas públicas. El estudio Fraude y corrupción en México, (consultora KPGM) consigna que 77% de las empresas extranjeras que operan en México han padecido fraude o se involucraron en evento de corrupción.
México enfrenta la derrota por la debilidad masiva de mecanismos personales auto regulatorios que deben funcionar para activar la autocensura y la censura a terceros, respecto a conductas de apropiación ilegal e ilegítima. En 2007, México ocupaba el lugar 72 de 183 países. Un gobierno sin contrapeso lo llevó al número 100 en 2011. La calificación de México fue de 3, donde 0 es la calificación para los más corruptos, y 10 para los menos corruptos. México es el miembro más corrupto de la OCDE (34 países en 2011)
El régimen político ejerce doble discurso. Ataca la corrupción, pero funcionarios gubernamentales ejercen privilegios. La corrupción, la falta de ética y las conductas de aprovechamiento persisten en la sociedad mexicana. Las prácticas corruptas no se dan de forma ocasional y no organizada, se dan por esquemas de acción dentro de las organizaciones. Las prácticas tienen tan profundo arraigo que se institucionalizan. La red de corrupción se estructura, mueve recursos, interés financiero, familiar, partidista, de grupo. Sólo la prevención, la cultura ética y la práctica de valores en el servicio público permitirán desterrar la corrupción institucionalizada, no el presidentito López.