Muchas veces hemos descrito la importancia que desde nuestra óptica tiene la actividad del turismo en la entidad, considerando las posibilidades que tiene Tamaulipas para ofrecer al mundo sus atractivos de toda índole.
Somos afortunados al contar con más de 400 kilómetros de franja fronteriza con sus distintos atractivos que van desde el turismo rural, médico, comercial y recreativo, pasando por su litoral del Golfo de México, sierras, ríos, presas, lagunas y la maravillosa Reserva de la Biósfera de El Cielo, por comentar solamente algunos de los que tenemos registrados y que en tiempos vacacionales hacen la delicia de miles.
Hoy tenemos un nuevo proyecto que al parecer tiene buenas expectativas y podría beneficiar directamente al municipio de Victoria, ante la imposibilidad de que sus autoridades actúen.
El lugar se llama Altas Cumbres y sus habitantes se “pusieron la pila”, y han buscado la manera de sacar provecho de tan maravilloso lugar.
Se pretende dar vuelo a un proyecto turístico denominado “Camino Real a Tula”, instalando en el ejido de referencia lugares gastronómicos y de venta de artesanías, en un gran esfuerzo del gobierno del estado por promover sus comunidades, y por hacerles partícipes de esfuerzos… y beneficios.
En ese sentido se recogen las palabras del subsecretario de turismo José Luis Martínez Partilla, quien hace ver también que Altas Cumbres cuente y contará con un mirador que ha sido ya la delicia de muchos y que en tanto se pueda acondicionar y arreglar mejor, tendrá mayor proyección y, por ende, mayor número de visitantes.
La diversidad de que hablamos en cuanto a sitios turísticos crece en Tamaulipas, y eso tiene mucho que ver con la visión que el gobierno estatal impulsa, apoyados por iniciativas ciudadanas que tienen realmente una justificación y se pretende que sean generadoras de beneficios para la sociedad tamaulipeca.
Resulta interesante leer que existen estos proyectos producto también de una parte importante del Plan EStatla de Desarrollo del gobernador Francisco García Cabeza de Vaca, y que subraya la importancia de la llamada “industria sin chimeneas”.
Altas Cumbres tendrá un importante desarrollo y para ello se están invirtiendo recursos que permitan que se pueda llevar a cabo el mismo con éxito y beneficios para muchos.
Lo ue hay que destacar también es la participación ciudadana: no se esperan a que el gobierno deje todo el recurso, sino que están siendo partícipes y así será con las utilidades, por supuesto.
Dentro del proyecto se considera también incorporar el Balcón de Montezuma, un sitio arqueológico habilitado en el sexenio de Américo Villarreal Guerra, y que hoy es uno de los pocos sitios de su tipo en la entidad, pero que mediante la tutela de la Dirección de Parques y Biodiversidad del Estado podrá estar disponible para su conservación y visita, así como su promoción que resulta fundamental.
El acceso al sitio es de fácil hechura, ya que Altas Cumbres se ubica a 18 kilómetros de la ciudad y para llegar al Balcón de Montezuma y admirar las ruinas prehispánicas se requiere caminar un tramo de terracería de 4 kilómetros únicamente.
Accesible y necesario fomentar este tipo de acciones que nos permiten valorar lo nuestro, propiciar la participación ciudadana, y sobre todo, buscar formas de allegarse recursos a través de los paseantes, una forma sencilla y muy provechosa.
Ojalá tuviéramos más sitios arqueológicos, pero lo importante es que hay una gran iniciativa de los tamaulipecos del lugar que, esperamos, contagien a los de otros sectores de tan prolífico estado.
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