Hace aproximadamente mes y medio, en COPARMEX Victoria gestionamos lo conducente para hacer posible la visita del Maestro Miguel Treviño de Hoyos, para que nos compartiera a través de una conferencia magistral, sobre qué versa el ejercicio de rendición de cuentas llamado “Alcalde, ¿cómo vamos?, cómo funciona, y cuáles son sus marcos prioritarios para revisar de tan cerca como nos sea posible, las tareas del Alcalde.
Y, por esta vía, estimado lector, en columna que titulé “Anticorrupción y ¿Alcalde, Cómo vamos?” señalé que era buena noticia que llegaba para quedarse esta plataforma, y que seguro estaba que marcaría un antes y un después en la historia democrática de nuestra capital el aterrizaje de este ejercicio, pues como dije y sostengo: en Victoria hace falta mucha cultura para calificar de manera más objetiva a nuestras autoridades electas.
Y es que poco se habla del ejercicio del gasto público municipal, y es justo ese uno de los retos de este esfuerzo: las acciones del Alcalde no deben quedar fuera del análisis del gran juez, que es la sociedad.
Adán Moctezuma escribió hace días acerca de la participación directa del hoy alcalde victorense en la toma de decisiones en materia de política económica en el sexenio de Eugenio Hernández, pero, aunque concuerdo con muchos de los datos y conclusiones de Adán en la columna que tituló: “¿Qué tanta corrupción toleran los tamaulipecos?”, lo cierto es que esta nueva plataforma que se implementará en Victoria no tendrá por objeto señalar cuestiones del pasado, sino que, se circunscribirá a poner sobre la mesa –de manera objetiva- cómo vamos en materia de transparencia, finanzas claras y servicios públicos.
Los invito a estar muy pendientes, pues aunque pasaron ya algunas semanas desde la visita de mi amigo Miguel Treviño, líder independiente en Nuevo León, precursor de esta plataforma ciudadana, en los próximos días les tendremos noticias del aterrizaje de “Alcalde, ¿Cómo vamos?”
Más nos vale como victorenses involucrarnos más, el notorio atraso económico de nuestra capital, si bien se debe en gran medida a la política económica que han dictaminado para la ciudad nuestros dirigentes, también hay responsabilidad en la sociedad: hemos sido omisos, hombre.