Oscar Almaraz Smer se ha dado cuenta que ser presidente municipal de Ciudad Victoria, no es tan fácil como parecía, pues batalla para cumplir los compromisos pactados, por culpa del estrangulamiento económico que le receta el gobierno estatal, panista.
Amigos del ex tesorero estatal, en el régimen de Eugenio Hernández Flores, le recomiendan que desista de buscar la reelección, pues los agobios económicos se están reflejando en sus propias finanzas personales.
El Gobernador Francisco García Cabeza de Vaca estuvo en Reynosa para atestiguar otra matanza de personas, siete según el reporte oficial, pero más del doble, según las redes sociales. Cabeza de Vaca patrocina en municipios conferencias sobre valores humanos, impartidas por el hijo del narcotraficante más peligroso de Colombia, extinto, y se hace acompañar en las sesiones de fotografías por sus cercanos colaboradores a los que la voz de la calle atribuye calidad de precandidatos.
Reynosa volvió a vivir una jornada de terror desde la noche del jueves y la madrugada del viernes, en muchas colonias, con balaceras, persecuciones, choques, reguero de poncha-llantas. La escuela primaria “Villa y Zapata” fue tomada por soldados cuando sicarios intentaron usarla como parapeto o tal vez para tomar rehenes y ponerlos de escudo.
Los alumnos se tiraron llorando al suelo, lo mismo que sus profesores. La lluvia de balas hirió a personas inocentes, una de ellas que llegó por su propio pie a un hospital, sólo para ser detenida por soldados, dos horas después. Otra bala perdida entró por una ventana y se estrelló en un Cristo empotrado en la pared, casi en la puerta de la recámara de los niños de la casa.
Esta video-historia rueda en redes sociales. Volvió a fallar el sistema de alertas sobre situaciones de riesgo con el que el gobierno del Estado suplió al semáforo del gobierno municipal. Hubo también estallidos de violencia en Río Bravo, pero igual, el gobierno del Estado los minimizó al darles a estas versiones el nivel de trascendidos. El Grupo de Coordinación Tamaulipas donde predominan SEDENA y SEMAR, no han modificado las estrategias de combate contra los infractores de la ley, y el Gobernador Cabeza de Vaca no ha presentado formalmente ningún programa específico para buscar mejorar los resultados.
Tampoco ha enviado el gobierno estatal, panista, a ningún policía estatal a capacitarse a Estados Unidos, como lo prometió Cabeza de Vaca en la campaña. Instauró en cambio, una campaña mediática contra casinos, taxis piratas y antros, por presumir que son instrumentos financieros de los delincuentes. Pero no tiene la Procuraduría General de Justicia de Tamaulipas, ni la PGR, una sola denuncia contra los dueños de ese tipo de negocios, especialmente los que han sido visitados por los inspectores-policías que comanda Arturo Soto Alemán. Simultáneamente, la economía sigue deprimida por la falta de circulante y los desesperados llamados que hacen en ese sentido los representantes empresariales, se estrellan en la indiferencia gubernamental.
El restaurante victorense Daddy´s, del hotel Ramada (antes Everest), cerró sus puertas por falta de clientes. Este lugar fue sede del memorable club Huebberson, integrado por periodistas, políticos y funcionarios, especializados en grilla palaciega. Estos grillos ahora itinerantes, especulan que no circula el dinero gubernamental de obra pública, despensas, becas, y hasta el destinado a comunicación social, debido a que se está haciendo un cochinito (ahorro), para financiar campañas electorales en 2018.
El Congreso local, dominado por la mayoría del PAN, se hace de la vista gorda y no se da por enterado de subejercicios, ilegales e inmorales. En temas políticos, nuestro amigo Juan Alonso Camarillo nos compartió la información que le enviaron de la Ciudad de México, en el sentido de que el PRI emitirá la convocatoria para renovar la directiva estatal, antes del martes 13, (toquen madera). Justo mañana se cumplirá un año de que se combinaron fuerzas extrañas y siniestras para permitirle al PAN obtener en
las urnas una votación atípica e increíble, para mandar a la lona al priista Baltazar Hinojosa Ochoa.
Fue una fecha funesta porque puso fin al nefasto gobierno de Egidio Torre Cantú, pero sólo para heredarlo a quienes están haciendo un remedo de administración, con todas las cosas puestas patas arriba, sin rumbo, sin cambio, sin bienestar social. Suena ridículo, absurdo, disparatado y necio, pero hasta se empieza a extrañar a Guillermo Martínez García, así de mal andan las cosas.
El PRI está echado a perder en Tamaulipas por la tardanza en rehacer la pedacería, pero es seguro que en las elecciones de 2018 recuperarán espacios, no tanto porque tengan mejores candidatos, mejores estrategias y mejores operadores. Ganará el PRI porque el PAN convertido en gobierno, decepcionó a propios y extraños, y nadie querrá darles a sus candidatos un refrendo sino todo lo contrario, un voto de castigo por estar echando por la borda la promesa de un cambio verdadero. En este caso aplica con toda justicia el refrán de que salió peor el remedio que la enfermedad.
También mañana sabremos el derrotero de México rumbo a la sucesión presidencial, pues el desenlace de la batalla electoral en los Estados de México, Coahuila y Nayarit, será un preludio político. Los observadores no tienen duda que el PAN arrasará en Nayarit y Coahuila, pero titubean en su pronóstico en el Estado de México.
Nosotros les cantamos Las Golondrinas a Enrique Peña Nieto y el PRI. También tiene relevancia que un tamaulipeco, el diputado local Óscar Martín Ramos Salinas, sea ahora secretario general del CEN del PANAL, un cargo que le entregó el presidente nacional Luis Castro. En Texas, El Rey de los Dragones, ese paisano corruptor de Gobernadores (incluso el del Estado de México, el anterior), pagó hasta con sus calzones el derecho de recuperar la libertad. La justicia gringa le quitó cinco millones de dólares, un jet, dinero en efectivo, vehículos, centenarios y hasta diamantes, para permitirle abandonar la cárcel. En México, El Rey de la Justicia sería cuando menos Senador de la República.
A propósito de bandidos, el contralor gubernamental Mario Soria Landero llora en el hombro de los periodistas su decepción por conocer de todas las pillerías cometidas por Egidio Torre Cantú y sus cómplices, y no poder echarles el guante. Dice el funcionario, de Reynosa por supuesto, que esa pandilla hizo muy bien las cosas, pues se cuidaron de no dejar huellas, pruebas, evidencias de los saqueos, del latrocinio generalizado, del peculado. No es por afán personal persecutorio, pero los investigadores del señor Soria podrían sacarse la espina si ponen la lupa en las torres de pánico instaladas en Ciudad Victoria. Fueron millones de pesos tirados a la basura, porque nunca funcionaron y es fácil verificarlo: todavía están allí, como un monumento a la corrupción.
Ahora que si ellos no lo quieren ver, les daremos el consejo que un día le dio El Negro Sansores Pérez a don Fidel Velázquez, cuando el cetemista declaró a la prensa que no veía la democracia transparente: Compre otros lentes. En Ciudad Victoria, trabajadores del Hospital General consiguieron recuperar sus empleos gracias a la intervención de funcionarios de la Junta de Conciliación y Arbitraje, aunque no se confían porque saben del afán revanchista que campea en los vientos del cambio. Por cierto, en nuestra siguiente colaboración abundaremos en el tema de la recuperación del sindicato de maquiladoras fundado en Reynosa por Tito Rodríguez Saldívar, para el genuino secretario general Alberto Lara Bazaldúa.
Fue necesaria la intervención de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, en la Ciudad de México, para desbaratar la maniobra urdida en la Secretaría Estatal del Trabajo, para adueñarse de ese sindicato. El dirigente nacional de la CTM, Carlos Aceves del Olmo, intervino a petición de su representante en Reynosa, Reynaldo Garza Elizondo, para conseguir la mediación de la Secretaría Federal del Trabajo y echar a los impostores. Saludos a las colegas Karla Cabrera y Reyna Luna.