Las vacunas es una historia de éxito de la medicina y han transformado el panorama de la salud global. La Organización Mundial de la Salud estima que 2 a 3 millones de muertes se evitan al año por ellas en el mundo. Se salvan 178 millones de años de vida anuales. Un estudio en 73 países estimó que la aplicación de un cuadro de 10 vacunas de 2001-20 evitó 350 mil millones de dólares en costos de enfermedad.
El balance del impacto de la vacunación en México es imposible detallarlo, pero hay hitos. Entre 1989-90 se produjo la última epidemia de sarampión con 89,163 casos notificados y 8,150 defunciones, evento precursor de poner en marcha el Sistema Nacional de Vacunación. Desde entonces ninguna enfermedad prevenible por vacunación está entre las principales causas de muerte y la mortalidad infantil bajó de 47 muertes por mil nacimientos a 17.
México se ha sumado al esfuerzo mundial para eliminar el sarampión, la rubéola y el Síndrome de Rubéola Congénita. Estos esfuerzos eliminaron el sarampión (el último caso autóctono se registró en 1995), pero existe el riesgo de perder los logros por la importación de casos y la transmisión endémica de los virus del sarampión y rubéola. Por ello la Secretaría de Salud y el Centro Nacional para la Salud de la Infancia y Adolescencia lanzan una campaña de seguimiento a la vacunación contra sarampión y rubéola en niños de 1 a 4 años (8.5 millones) Se busca completar el esquema de vacunación de más de 11 millones de niños de 5 a 9 años. La campaña tendrá duración de 10 semanas, (19 abril al 25 de junio) El camino a la inmunización lo impulsa la comunidad mundial de vacunas con un desafío común: salvar vidas, mejorar la salud y garantizar la prosperidad a largo plazo a través de las vacunas.
Las vacunas tienen éxito en reducir enfermedades infecciosas: sarampión, difteria y poliomielitis, en muchos países pocas personas recuerdan su impacto devastador. Ninguna otra tecnología ha mostrado ser tan efectiva y rentable para salvar vidas y evitar enfermedades. La nueva generación de vacunas tiene el de impacto que sus predecesoras, reduciendo la enfermedad neumocócica y por rotavirus, principales causas de muerte de niños, y protegiendo contra cánceres causados por VPH (virus del papiloma humano) El progreso logrado en 7 décadas es notable, pero puede revertirse si somos complacientes. Vacúnate, protégete y protégeles.
La primera vacuna es la puerta de entrada a una vida saludable y próspera. A pesar de avances en aumento del acceso a la inmunización, 10.6 millones de niños en países de bajo ingreso no reciben ni una dosis de la vacuna básica, niños “dosis cero”, reflejo de poblaciones con desventajas económicas, sociales y culturales de manera sistemática, que les impiden acceder a servicios de inmunización y salud.
Covid-19 exacerbó la preocupación por mantener la cobertura de vacunación pues interrumpió servicios básicos de salud y de inmunización. En países de bajo ingreso, 14% de los niños con la primera dosis DPT no reciben la tercera, y 19% de los niños que reciben la primera contra la polio no reciben la tercera dosis.
Para México, la Organización Panamericana de la Salud, reporta que de 2015-19, tasas de cobertura de BCG, sarampión y vacuna neumocócica pasaron del 100% al 76%, 71% y 83%, muestra de lo oportuna y necesaria la campaña de seguimiento que Secretaría de Salud y el Centro Nacional para la Salud de la Infancia y la Adolescencia han lanzado. La respuesta coordinada de la industria biofarmacéutica frente a covid-19 mostró que se puede lograr con un investigación robusta.