Pues la magnífica historia de este vehículo no fue descubierta hasta hace algunos pocos años atrás, cuando fue descubierta en Shepperton, cerca de Londres, para ser restaurada a su estado original, lo cual tomó cuatro años para lograrlo.
Dijeron también que esta vieja casa rodante es de la primera que hay algún registro, pues dijeron fue creada antes de la primera guerra mundial.
Además dijeron que literalmente una empresa metalúrgica llamada Baico decidió alargar el chasis de un Ford T, mientras que pidieron a una constructora de carruajes realizar la carrocería, la cual fue construida completamente de mandera.
El piso era también de madera, al igual que paredes y techo, aunque en el proceso de restauración decidieron colocarle una alfombra para darle mayor calidez, dijeron además que la iluminación era a través de faroles a gas y hasta se le había colocado un buzón para cartas por si la estadía era prolongada en algún sitio.
Comentaron que en su interior diseñaron un ambiente único bien espacioso en el que estaba incluida la cabina del conductor, la cual naturalmente no era nada especial, si no que tenía un asiento enterizo de Ford T, el cual podía girarse para ser convertido en un sofá.
Por lo que el próximo 10 de septiembre la casa de subastas Bonhams espera obtener por la casa rodante más antigua al menos entre 22 mil y 35 mil dólares y ser entregada a su nuevo propietario.