Aproximadamente, 25% de los latinoamericanos, principalmente las mujeres, han sido víctima de acoso digital y una de las herramientas que más se utiliza es el stalkerware, por lo que las personas deben estar conscientes de su impacto y cómo evitarlo.

De acuerdo con el estudio Acoso Digital en las Relaciones, realizado por Kaspersky, poco más de la mitad de América Latina sabe qué es el stalkerware, a pesar de que más de 54% indicó que una de las formas más comunes de acoso digital es el monitoreo del teléfono móvil.

Un stalkerware es una aplicación que se comercializa de manera legal y se instala de manera manual en los dispositivos, por lo que el acosador debe tener acceso físico al teléfono de la víctima”, explicó la gerente de ventas y productos para el consumidor en Kaspersky México, Judith Tapia.

Logran comercializarse en las tiendas de aplicaciones porque los desarrolladores las marcan como control parental o para monitorear a los trabajadores, aunque en realidad resulta ilegal al tener acceso a información privada y tener mecanismos para ocultarse.

Por eso se necesita un trabajo holístico donde todos los jugadores, como tecnológicas, instituciones, academia y gobiernos deberían tratar de combatir esta herramienta de hostigamiento digital.

Una vez instalado el stalkerware, detalló, el acosador puede acceder desde su equipo a un gran número de datos de la víctima de forma remota como localización, fotos, video, historial de navegación e incluso prender la cámara o el micrófono. “Creemos que es un problema que debe ser visto desde una perspectiva de abuso y violencia doméstica”.

¿CÓMO SABER?

Carolina Mojica, gerente de Productos de Consumo para norte y sur de América Latina en Kaspersky, indicó que la primera defensa contra este tipo de programas maliciosos es tener una buena seguridad.

Algo que no sucede en la región, ya que 55% de las personas comparten contraseñas con sus parejas o 34% comparte servicios como iCloud o la cuenta de Google, lo que las puede dejar vulnerables.

Dado que el stalkerware se oculta en el dispositivo algunas formas para darse cuenta de éste es que aumente el uso de datos móviles, la batería se agote rápidamente, hay un ruido de fondo sospechoso en las llamadas, detectar aplicaciones desconocidas o darse cuenta de que conoce la información privada y que se tiene resguardada o se ha compartido a través del equipo.

No se recomienda desinstalar la aplicación porque eso podría alertar al acosador, sino denunciar.