Starlink es el servicio de Internet satelital de Elon Musk de alta velocidad que está a punto de iniciar operaciones en todo el mundo. Con un costo de 99 dólares al mes y unos cuantos cientos de dólares más de inversión por equipo, para gran parte de los usuarios de la red, el servicio no luce atractivo e incluso resulta confuso en cuanto a su objetivo a corto plazo. Sin embargo, gracias a la prueba piloto que realizará Chile junto con Starlink, el potencial de este “súper Internet” tal vez nos quede más claro.
Chile llegó a un acuerdo con SpaceX para convertirse en el primer país de Latinoamérica en probar ese ansiado Internet de Starlink. Los satélites de Elon Musk no estarán disponibles para partículares. El gobierno chileno los usará para llevar una conexión de Internet estable a escuelas dentro de comunidades que no cuenten con infraestructura óptima de telecomunicaciones.
La prueba piloto de Chile probará Starlink con escuelas de las localidades de Caleta Sierra y Sotomó ubicadas en las regiones de Coquimbo y Los Lagos. Ambos son pueblos remotos del país sudamericano cuyas poblaciones unidas suman menos de 500 personas.
La Presidenta de SpaceX, Gwynne Shotwell, aseguró que el acuerdo entre la compañía y Chile refleja a la perfección el objetivo de Starlink: llevar Internet de alta velocidad a donde quiera que el humano se encuentre.
“Starlink fue diseñado para comunidades remotas como las de Caleta Sierra y Sotomó” Escribió Shotwell en un comunicado de prensa.
La prueba piloto contempla la entrega de equipos programados para dar servicio gratuito por un año. Si bien Starlink todavía no puede otorgar el Gb/s de velocidad que prometió, la cuota alcanzada en Chile fue de 50 a 150 mb/s, lo cual es, para los estándares latinoamericanos, una conexión aceptable.
Starlink de Elon Musk iniciará operaciones oficialmente en septiembre del 2021. La flota actual de satélites en el espacio es de 1,500, pero la compañía tiene la meta de 42,000 “repetidores” puestos en marcha para los siguientes años.