Se llama inductores de colágeno natural a diversas sustancias que se inyectan en la piel a los fines de activar la producción de dicha proteína. Esta es la que confiere el volumen, la elasticidad y la firmeza de la apariencia tersa propia de la juventud.

Ahora bien, el cuerpo sintetiza colágeno de manera natural. Pero con la edad disminuye la reposición o se acelera su degradación. De esta forma, comienzan a notarse distintos signos del envejecimiento: arrugas, flacidez, pérdida de humedad.

En vista de ello, se aplican diversos procedimientos estéticos a los fines de reponer o contrarrestar los efectos visibles. Entre estos tratamientos se encuentran los inductores de colágeno natural.

Importancia del colágeno

Aunque lo relacionamos más con la piel, el colágeno es una proteína que se encuentra presente también en los músculos y los huesos, así como en tendones y cartílagos, hasta en el cabello y la córnea.

Por ello, no es de extrañar que sea la más abundante del cuerpo, representando la cuarta parte del total de las proteínas humanas. En general, su función es aportar flexibilidad y resistencia a los tejidos.

Pero a partir de cierta edad, entre los 30 a 40 años, comienza a mermar la capacidad del cuerpo de producirlo de manera natural. Y cuando disminuye su presencia, esto se nota en los signos del envejecimiento de la piel.

Pero no solo es eso, sino que hay una variedad de problemas de salud asociados con la falta de colágeno, tales como los siguientes:

Várices.
Esclerosis sistémica.
Síndrome de Marfan.
Fibrosis submucosa oral.
Epidermólisis ampollosa.
Síndrome de Ehlers-Danlos.
Poca movilidad de articulaciones.

¿Qué son los inductores de colágeno natural y para qué se usan?

Como el mismo nombre lo da a entender, los inductores de colágeno natural son productos que se introducen para estimular la producción de la proteína. Los mismos suelen ser inyectados en el rostro, aunque también en otras partes del cuerpo.

Por lo general, se trata de hilos de sutura quirúrgica. Es importante señalar que la longitud y el grosor de tales hilos, la cantidad de los mismos, así como el material, dependerán de las características del paciente y de la zona en que se va a aplicar el tratamiento.

Las sustancias que se insertan en la piel para ser usadas como inductores de colágeno natural son materiales biocompatibles que pueden ser absorbidos por el cuerpo al cabo de un tiempo. Entre las más empleadas se tienen las siguientes:

Ácido poliláctico.
Policaprolactona.
Hidroxiapatita cálcica.
Betafosfato tricálcico.

Ahora bien, con el uso de estos compuestos, la finalidad que se persigue es inducir una fibrosis (síntesis de colágeno propio), a partir de lo cual se espera disminuir la flacidez o reafirmar la piel.

¿Cómo se hace el tratamiento de inducción de colágeno?

En primer lugar, el médico especialista en esta técnica debe realizar una evaluación, a los fines de reconocer cuál es el área a tratar y el inductor de colágeno natural más adecuado, según las características del paciente.

En el marco de la preparación para el tratamiento se realiza una limpieza del área. Luego se aplica anestesia tópica para disminuir las molestias relacionadas con los pinchazos.

Las punciones se hacen en las zonas que presentan flacidez. Como se mencionó, se aplica en el rostro, pero también en brazos, abdomen, muslos y glúteos.

En el rostro, las áreas más frecuentemente tratadas son las siguientes:

Surcos nasolabiales (líneas de marioneta).
Contorno del mentón.
Línea submandibular.
Zona submalar.
Pómulos.

Por otra parte, suele requerirse más de una sesión. Aunque esto depende de la sustancia y del objetivo deseado. Cada sesión toma cerca de 20 minutos. Y entre una y otra se deja trascurrir un periodo de 1 mes.

Tras el tratamiento con inductores de colágeno natural se recomienda evitar el ejercicio y el agua muy caliente, al menos las primeras 24 horas. De igual modo, se deben tomar precauciones con respecto a la exposición a la luz solar intensa durante una semana.

¿Para quiénes se recomienda?

Los inductores de colágeno natural están indicados para personas que comienzan a notar flacidez o falta de tersura en la piel. También se pueden aplicar cuando hay pérdida de volumen facial por diversas razones (por ejemplo, por una dieta de adelgazamiento).

Se puede hacer en pacientes a partir de los 35 años. Sin embargo, no se consideran de utilidad en personas de edad muy avanzada, que tienen poca capacidad de regenerar colágeno.

¿Cuándo comienzan a notarse los resultados?

Los pacientes tratados pueden notar una mejoría inmediata en el volumen facial. Pero esto es un efecto transitorio que desaparece a las 48 horas.

Lo normal es que luego de 15 a 20 días comiencen a actuar los inductores de colágeno natural, estimulando la producción de la proteína. El resultado definitivo del tratamiento se aprecia a las 3 o 4 semanas. Dependiendo de ello, puede ser necesaria o no la siguiente sesión. Es oportuno señalar que durante este tiempo los hilos se irán reabsorbiendo.

Los efectos pueden permanecer durante 6 meses a 1 año. Esto puede variar según el paciente o qué tan afectada esté la zona. También hay algunas cosas que pueden hacerse para prolongar los resultados, como una buena alimentación e hidratación, protegerse de los rayos UV, evitar el consumo de tabaco.

Se asegura que los inductores de colágeno natural brindan diversos beneficios:

Estimulan la producción de colágeno tipo 1 y 3.
Son compatibles para distintos tipos de piel.
No afectan la expresión natural de los gestos.
Ayudan a definir el contorno del rostro.
Previenen la pérdida de firmeza.
Minimizan la flacidez.

Posibles efectos secundarios y contraindicaciones

Se asegura que el tratamiento con inductores de colágeno natural genera pocas reacciones. Sin embargo, en estudios se han reportado la aparición de nódulos subcutáneos después de la aplicación de hidroxiapatita de calcio.

Por otra parte, entre los efectos secundarios se señalan el dolor, el enrojecimiento, la inflamación y los hematomas en la zona tratada. Esto ocurre raras veces y no son reacciones graves que impidan que el paciente tratado pueda realizar sus actividades cotidianas.

En cuanto a las contraindicaciones, la aplicación de inductores de colágeno natural no se recomienda en casos en los que el descolgamiento de la piel es debido al acúmulo de grasa, en pacientes con excesivo sobrepeso u obesidad mórbida.

No obstante, en la gran mayoría de las ocasiones se considera que es un tratamiento seguro, siempre y cuando sea realizado por un profesional médico especializado y en las condiciones sanitarias acordes.