Las uvas koshu son originarias de la ciudad del mismo nombre, la cuál está en la prefectura de Yamanashi, Japón, en donde la mayoría de su población se dedica a la vicultura y producción de vino.
Esta uva tiene una historia de cultivo que se remonta a más de mil años en Japón, justo en el siglo VIII, siendo una variedad de uva japonesa típica, autóctona de Europa, que se usa para hacer vino japonés.
La Koshu es una uva rosada con piel gruesa y resistente, la cuál ayuda a proteger la fruta del clima húmedo de Japón, lo cuál la hace perfecta para crear vinos y bebidas frutales que suelen ser ligeras, frescas, con notas cítricas y un poco de acidez.
Una de las bebidas más famosas creadas por la uva rosada japonesa, es el vino rosado Koshu, el cuál usa como sabor base la uva pero también tiene algo de albaricoque, minerales, limón, melocotón y pera, dando el resultado una bebida frutal única y fresca, ideal para acompañar el sushi.
Los japoneses pensaban que el único alcohol que era de verdad era el que ellos hacían a base de arroz, y que el que se hacía con uvas, era alcohol “europeo”, por lo que tardó en tener popularidad en 1877.