“Una sola noche de exposición a una iluminación moderada de la habitación durante el sueño puede perjudicar la regulación de la glucosa y el sistema cardiovascular, que son factores de riesgo de enfermedades cardiacas, diabetes y síndrome metabólico”, detalló la autora de la investigación, Phyllis Zee, de la Universidad Northwestern.

Dormir en una habitación con una iluminación moderada activa el sistema nervioso autónomo, lo cual es negativo para la salud, puesto que normalmente el ritmo cardiaco, así como otros parámetros cardiovasculares son más bajos durante la noche y más altos en el día, señaló Daniela Grimaldi, otra de las autoras de la investigación.

En este sentido, la investigación reveló que exponerse a luz moderada durante el sueño hace que el cuerpo entre en un estado de alerta mayor, en el que el ritmo cardiaco incrementa, al igual que la fuerza con la que el corazón contrae y la velocidad con la que la sangre circula hacia los vasos sanguíneos.

Cabe destacar que un gran porcentaje de la población, cerca del 40 por ciento, duerme con una lámpara de cabecera encendida o con algún tipo de luz en la habitación, como el de la televisión, detalla el estudio.