Muchas personas lo desconocen, pero los padres que trabajan tienen derecho a pedir licencia por paternidad. La Ley Federal del Trabajo (LFT) reconoce como una obligación del patrón otorgar un permiso con goce de sueldo.
El artículo 132, fracción XXVII Bis, de la LFT establece la obligación del patrón de otorgar una licencia de paternidad de cinco días laborables con goce de sueldo a los hombres que trabajan al momento de que nace su hijo. De igual manera, en el caso de la adopción de un niño.
En la legislación se indica que los cinco días se cuentan a partir del día de nacimiento del bebé o cuando se reciba al menor adoptado. En caso de no recibir el permiso, el trabajador tiene que contactarse con la Procuraduría Federal de la Defensa del Trabajo (Profedet) para interponer una denuncia.
“Cinco días de licencia generalmente son insuficientes para alguien que acaba de ser padre. Existen algunas empresas que ofrecen, de manera interna, más días de permiso que los contenidos en la ley. De igual manera, los trabajadores pueden negociar con sus empleadores periodos más prolongados o solicitar vacaciones de manera anticipada”, señala Andrea Rojas, Head de Recursos Humanos en Runa.
La importancia de la licencia por paternidad
Según el informe ¿Son los países ricos más favorables a las familias?, realizado por la UNICEF, el permiso remunerado por paternidad ayuda a que los padres puedan establecer vínculos con sus hijos e hijas, contribuye al desarrollo saludable de los lactantes y los niños, además de reducir la depresión materna y cerrar la brecha de la igualdad de género.
Beneficios para los padres de familia
El permiso por paternidad es un derecho: desde 2012 el permiso remunerado por paternidad se encuentra incluido en la LFT. Los padres trabajadores tienen derecho a cinco días de licencia a partir del nacimiento de su hijo o hija o cuando reciban al menor, en el caso de adopción.
Cerrar la brecha de género: en México, la licencia por maternidad es de 12 semanas y, al igual que la de paternidad, está muy por debajo de las cifras promedio de las naciones de la OCDE. Durante este periodo, las mujeres tienen que preocuparse por su recuperación del parto o cesárea, además del cuidado del recién nacido. Un permiso por paternidad más amplio puede impulsar la corresponsabilidad entre hombres y mujeres en la crianza de los hijos.
Empleados más motivados: otorgar más días que los obligatorios del permiso por paternidad puede ayudar a que el trabajador se sienta más tranquilo, a que pueda apoyar en las tareas de crianza y esté menos presionado. Además, de esta manera, el colaborador puede regresar más motivado y enfocado en sus actividades.