Las semillas son consideradas un súper alimento por sus múltiples beneficios pero a veces podemos confundirlas, sobre todo si hasta se parecen en el nombre. Por ejemplo, ¿sabes las diferencias entre chan y chía? Suenan parecido pero no son lo mismo.

En muchos lugares vas a encontrar personas que quieran hacerlas pasar por semillas hermanas pero la realidad es que son distintas tanto en exterior como en sus propiedades, aunque claro, ambas son buenísimas para nuestra salud.

¿Qué es la chía?
Primero, la semilla de chía proviene de Centroamérica y es rica en vitaminas y minerales, así como ácidos grasos, por ejemplo, el omega 3. Su sabor es parecido al de la nuez y pueden ayudarte a otorgar esa sensación de saciedad, por lo que son excelente opción para incluirlas en tu dieta.

La chía tiene hasta 12 veces su peso en agua, lo que te ayuda a mantenerte hidratado; a esto súmale su alto contenido en fibra y que si la mezclas con otros alimentos, no pierde su textura ni sabor.

¿Qué es el chan?
La semilla de chan es originaria de México y Guatemala, también se le conoce como orégano cimarrón, mastranzo y mastrano. También es un tipo cereal como la chía y era utilizado desde la época prehispánica; sin embargo, es en la actualidad cuando empezamos a conocer realmente sus beneficios, según señala SemillasDe.org.

El chan es efectivo para tratar la diarrea, dolor de estómago, fiebre y hasta la acidez. Incluso se tienen estudios donde se demuestra su utilidad como insecticida y conservante natural de granos, ¡una maravilla!

Diferencias entre chan y chía
Ambas semillas son fuente de alimento poderoso, con alto contenido nutricional ; sin embargo, las diferencias entre chan y chía sí están marcadas, empezando por su tamaño y hasta color.

La chía es pequeña y en una tonalidad verde, todos la conocemos, mientras que el chan es un poco más grande, casi del tamaño de las lentejas, y con un tono que va más para el café.

Aunque ambas semillas son consideradas súper alimentos por su contenido en fibra y otros nutrientes, a la chía se le relaciona más con los ácidos grasos; mientras que al chan, con los minerales.

Otra diferencia muy marcada entre la chía y el chan es su olor: sabemos que la primera no tiene un aroma en particular pero la segunda es todo lo contrario. De hecho, el chan sí huele y es bastante aromático.

También cuando le echamos chía a las bebidas, vemos a las semillas flotar en éstas y ser parte visible, algo que no sucede tanto con el chan. Si bien son semillas, cuando entra en contacto con líquido, empieza a formar un gel.

Aunque es fácil encontrar ambas semillas a la venta, en teoría, la chía solo se da en época de calor, entre mayo y junio; mientras que el chan florece todo el año en los arbustos.