La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, llamó a las Naciones Unidas a ejercer un papel activo para contener la escalada de tensiones entre Venezuela y Estados Unidos, en un contexto marcado por el despliegue militar estadounidense en el Caribe y el anuncio de nuevas medidas contra el sector petrolero venezolano.

El pronunciamiento fue bien recibido por el Gobierno de Venezuela. El canciller Yván Gil agradeció públicamente a Sheinbaum y transmitió el reconocimiento del presidente Nicolás Maduro, al destacar el respaldo mexicano a los principios del diálogo, la paz y la no intervención establecidos en la Carta de la ONU.

La mandataria mexicana subrayó que cualquier controversia internacional debe resolverse por la vía pacífica y exhortó a la ONU a asumir su responsabilidad para evitar un posible derramamiento de sangre. Consideró que, hasta ahora, la actuación del organismo internacional no ha sido visible frente a la actual coyuntura.

En respuesta, Venezuela reiteró su postura de defender al Caribe como una “zona de paz”, al tiempo que reafirmó su compromiso con la soberanía nacional y el derecho a la autodeterminación. Caracas también insistió en la necesidad de respetar las rutas comerciales y de navegación internacional.

El llamado de Sheinbaum cobra relevancia en medio del endurecimiento del discurso del expresidente Donald Trump, quien anunció un bloqueo a petroleros vinculados con Venezuela y reclamó derechos sobre el petróleo del país sudamericano. En este escenario, México refuerza su papel como actor diplomático regional que apuesta por el multilateralismo y la solución pacífica de los conflictos.