La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) sacó de su lista de personas bloqueadas a la cadena de casinos Big Bola y a su dueño, el empresario Francisco Javier Rodríguez Borgio.

Mediante el Acuerdo 72/2022, el titular de la UIF, Pablo Gómez, dejó sin efectos el Acuerdo 143/2021, por el que había incluido a Rodríguez Borgio y sus empresas Comercial de Juegos de la Frontera –razón social de Big Bola–, e Inmobiliaria JRB en la lista de bloqueados, por sospechas de lavado de dinero en temas de huachicol y relaciones con casos como los de Caja Libertad y Oceanografía.

El pasado 7 de abril, la UIF pidió a la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) levantar el bloqueo de las cuentas, en ejecución del amparo 929/2021, concedido a Big Bola por un juzgado federal auxiliar con sede en Culiacán.

La UIF ejecutó el amparo, pese a que a finales de marzo lo impugnó ante el Décimo Octavo Tribunal Colegiado en Materia Administrativa. El 25 de abril, Pablo Gómez envió un oficio al tribunal colegiado para desistir de su recurso, informando que ya había liberado las cuentas.

“El 22 de abril de la presente anualidad, persona autorizada acudió a una sucursal del banco (nombre censurado por el juzgado), siendo atendido por un ejecutivo, el cual manifestó que las cuentas se encontraban ‘embargada’ por una autoridad de la cual no supo dar referencia, argumentando que la orden la había realizado la CNBV”, afirmó Big Bola en su nuevo amparo.

El 12 de mayo, la jueza Blanca Lobo se declaró incompetente para llevar el asunto en la Ciudad de México, y envió el expediente a un juzgado de Querétaro.

La empresa sostuvo ayer que las cuentas ya no están bloqueadas y el amparo solo busca detectar posibles bloqueos derivados de demandas civiles o mercantiles.

Big Bola también tiene problemas con el fisco. En mayo de 2018, el SAT le fincó un crédito fiscal de 591 millones de pesos, por omitir el pago de 144 millones de pesos de impuesto especial a las apuestas, así como aprovechamientos a la Secretaría de Gobernación, durante el ejercicio de 2014, sumados con actualizaciones y recargos.

El 26 de octubre de 2021, el la Sala Superior del Tribunal Federal de Justicia Administrativa (TFJA) anuló el crédito fiscal, por haber sido notificado fuera de los plazos legales, pero el SAT todavía litiga el caso.

En 2019, antes de la pandemia, la casinera reportó ingresos totales por 2 mil 844 millones de pesos. Big Bola opera un sitio de apuestas en línea desde 2016, así como veinte casinos en los estados de Sinaloa, Estado de México, Veracruz, Campeche, Guanajuato, Querétaro, Puebla, Sonora y la Ciudad de México, al amparo de un permiso de la Secretaría de Gobernación expedido en 1997.

En diciembre pasado, Francisco Javier Rodríguez Borgio realizó un acuerdo con el SAT para realizar el pago de más de 21 millones de pesos de adeudos del Impuesto sobre la Renta (ISR) en parcialidades.

El empresario ofreció un pago inicial de 20 por ciento y el resto en 12 mensualidades.

Libra denuncia por huachicol

Los empresarios Francisco Javier y Óscar Rodríguez Borgio, también libraron la acusación por supuesto huachicol.

En enero del 2015, una gasolinera del Grupo Queroil de la empresa Gasolineras Grupo Mexicano GGM, en aquel momento de su propiedad, supuestamente vendían “huachicol” y lavaban las ganancias en sus casinos.

En aquella ocasión la entonces PGR encontró un camión descargando combustible supuestamente robado en una de sus gasolineras.

Sin embargo desde octubre del 2019, el MP y titular de agencia investigadora Rubén Casanova Medellín resolvió el no ejercicio de la acción penal “por obstáculo material insuperable”.