El presidente Andrés Manuel López Obrador descartó que cualquier variante –como la Delta— de COVID-19 ponga en riesgo a los menores de edad, es decir, no es un “asunto grave”.

“Tenemos que estar atentos, pero todavía no hay algo grave en la afectación de niños por COVID-19 de ninguna variante, no es un asunto grave, afortunadamente”, aseguró el mandatario.

En la mañanera, explicó que lo que sí está constatando es que, en estos momentos, los jóvenes se están contagiando más, no sólo en el país, sino en el resto del mundo.

Subrayó que este sector poblacional tiene más resistencia a la enfermedad, pero insistió en que se cuiden, apliquen las medidas sanitarias y, sobre todo, que se vacunen.

Recordó que al inicio de la pandemia se dijo que los más afectados por el COVID-19 eran los adultos mayores y las personas con alguna enfermedad crónica.

“¿Se acuerdan cuánto insistimos en que primero (se vacunaran) los adultos mayores? Había presiones y las resistimos. Y dijimos: `Los adultos mayores, porque son los más vulnerables`, y repetía y repetía: ‘Si vacunamos a los adultos mayores, dicen los especialistas que podemos reducir el número de fallecimientos hasta en un 80 por ciento’. Eso lo dije muchas veces.

“Y nos pedían que cambiáramos la estrategia, y no, empezamos de los mayores hacia la gente más joven… Ahora la mayor parte de los que fallecen por COVID-19 son personas que no han sido vacunadas”, expuso.

El mandatario federal reconoció que hay un porcentaje mínimo de personas que a pesar de haber sido vacunadas se pueden infectar, sobre todo si solamente se han aplicado una dosis.

Entonces, añadió, en el caso de niños y jóvenes, todavía afortunadamente no es un asunto grave.

“En estos tiempos que se relajaron y que hubo en algunos casos vacaciones y se fueron a los centros turísticos bastantes jóvenes (se contagiaron), pero afortunadamente sin ser hospitalizados y sin gravedad”, remató.