Los Puentes Internacionales I y II fueron bloqueados por manifestantes durante más de 3 horas en protesta contra la Guardia Nacional, a quien acusan de ejecutar extrajudicialmente a un hombre y provocar la muerte por atropellamiento de una ciudadana estadounidense.

Cientos de personas, amigos y familiares de una de las víctimas, Jorge Alberto, de 42 años, realizaron las protestas en los dos cruces internacionales, en un “cuartelito” de la Guardia Nacional, en las oficinas de la FGR y en Cuartel de la GN en el kilómetro 7 de la Carretera Nacional.

Jorge Alberto, de 42 años, fue baleado por elementos de la Guardia Nacional en Ocampo y Victoria el jueves, 8 de abril, y testigos señalan que fue rematado en el interior de su camioneta, en donde además le sembraron una bolsa de mujer con marihuana y varias balas.

Herido, Jorge Alberto choca contra un puesto de hamburguesas y varios vehículos; ahí muere atropellada la mujer, una ciudadana norteamericana que acababa de cruzar de Laredo, Texas a Nuevo Laredo, para visitar a sus familiares.

A las 10:30 de la mañana los ciudadanos, acompañando a amigos y familiares de Jorge Alberto se manifestaron en los dos Puentes Internacionales, que fueron cerrados a la circulación.

Al grito de “justicia, justicia” y “Guardia Nacional asesinos” los manifestantes exigían la presencia de los involucrados en el artero asesinato del padre de familia y de la mujer estadounidense.

Hasta las 13:15 horas los puentes internacionales fueron reabiertos. Los manifestantes se centraron en protestar frente a un “cuartelito” de la Guardia Nacional en instalaciones del Hospital General del IMSS, junto a la Guardería.

Testigos de los hechos narraron cómo la tarde del jueves, elementos de la Guardia Nacional que iban caminando, dispararon sin mediar motivo alguno contra Jorge Alberto, quien conducía una camioneta Ford F-150 modelo 2002, circulando de sur a norte por la avenida Ocampo.

Antes de llegar al crucero con la calle Victoria, el personal de la Guardia Nacional dispara en contra del padre de familia, quien herido pierde el control, chocando contra un puesto ambulante y cinco vehículos, antes de quedar a unos metros de la calle Bravo.

Los testigos señalan que los elementos de la Guardia Nacional llegaron hasta la camioneta de Jorge Alberto y le dispararon, ejecutándolo de forma extrajudicial. La mujer, aún no identificada, murió atropellada por uno de los autos chocados y no se permitió el acceso a paramédicos para que la revisaran.

A la víctima le sembraron una bolsa de mujer con varias dosis de marihuana y algunas balas. Le iban a poner un arma, pero al darse cuenta que había muchos testigos ya no lo hicieron porque los estaban grabando y tomando fotos.

Momentos después de la ejecución extrajudicial, amigos y familiares de Jorge Alberto fueron a protestar y lograron revisar dos unidades de la Guardia Nacional, una todavía con logotipos de la Policía Federal, encontrando ponchallantas, bebidas alcohólicas, un radio de frecuencia no oficial y otros objetos ilegales.