La especialista Lírice Díaz lanzó una alerta preventiva ante la presencia del virus conocido como “mano-pie-boca”, una enfermedad altamente contagiosa que afecta principalmente a niños menores de 10 años, aunque también puede presentarse en adultos y bebés.
El virus se propaga con facilidad a través del contacto con secreciones respiratorias, saliva, mucosidad, heces y hasta las lesiones que produce, advirtió la especialista. Acciones cotidianas como toser, estornudar, hablar o tocar objetos contaminados son suficientes para transmitirlo, por lo que la higiene constante y la prevención son clave para frenar su propagación.
Entre los síntomas más comunes, Díaz destacó la aparición de lesiones en palmas de las manos, plantas de los pies, boca, encías, lengua y paladar, que generan ardor y dolor. Estas manifestaciones pueden ir acompañadas de fiebre, irritabilidad y malestar general.
“Si ustedes notan que el niño presenta alguno de estos síntomas, acudan de inmediato al médico familiar, al pediatra o a la unidad de salud más cercana”, recomendó la especialista, insistiendo en no automedicar ante los primeros signos.
Para prevenir contagios, se enfatizó la importancia de lavado constante de manos, uso de cubrebocas y evitar compartir objetos personales. Enseñar estas medidas a los niños es fundamental para protegerlos.
La experta concluyó que la detección oportuna y la prevención son las principales herramientas para evitar complicaciones y frenar la propagación del virus, especialmente en la población infantil, considerada la más vulnerable.